La diócesis tiene 236 km² y extiende su jurisdicción sobre los fieles católicos de rito latino residentes en parte del distrito de Ernakulam en el estado de Kerala. La diócesis extiende su jurisdicción sobre la llamada "Comunidad del siglo XVIII" residente en el territorio de la diócesis de Alleppey y, recíprocamente, la diócesis de Alleppey tiene jurisdicción sobre la llamada "Comunidad del siglo XVI" residente en el territorio de la diócesis de Cochín.
La diócesis fue erigida el 4 de febrero de 1558 con la bula Pro excellenti praeeminentia del papa Paulo IV separando territorio de la diócesis de Goa (hoy arquidiócesis de Goa y Damán).[1]
El 13 de diciembre de 1572 el papa Gregorio XIII con la bula Pastoralis officii cura otorgó a los obispos de Cochín el derecho a suceder a los arzobispos de Goa.[2]
En 1599 cedió parte de su territorio para la erección de la ya existente arquidiócesis de Angamaly con un breve del papa Clemente VIII. En 1606 cedió otra parte de su territorio para la erección de la misión sui iuris de Madura (hoy diócesis de Tiruchirapalli) y el 3 de diciembre de 1659 cedió otra parte para la erección del vicariato apostólico de Malabar (hoy arquidiócesis de Verapoly).
En 1663 las iglesias, el colegio de los jesuitas, el monasterio franciscano y las escuelas fueron destruidos por los holandeses, que habían derrotado a los portugueses. Solo la iglesia franciscana, que pasó a ser utilizada para el culto protestante, escapó a la ruina, mientras que la catedral se utilizó como mercado.
El 3 de diciembre de 1834 cedió otra porción de territorio para de la erección del vicariato apostólico de Ceilán (hoy arquidiócesis de Colombo) mediante el breve Ex munere del papa Gregorio XVI.[3]
El 24 de abril de 1838 la diócesis fue suprimida con el breve Multa praeclare del papa Gregorio XVI,[4] quien, de manera drástica, decidió limitar los derechos del Padroado portugués suprimiendo la diócesis y atribuyendo sus territorios al vicariato apostólico de Verapoly (hoy arquidiócesis), bajo el control directo de la Propaganda Fide.[5]
El 1 de septiembre de 1886 se restableció la diócesis con la bula Humanae salutis del papa León XIII.[6]
El Gobierno portugués continuó ejerciendo los derechos del Padroado, con el privilegio adjunto de presentar obispos, hasta el acuerdo del 18 de julio de 1950,[7] que puso fin a esta institución después de casi cinco siglos. El último obispo portugués de Cochín fue José Vieira Alvernaz, nombrado arzobispo coadjutor de Goa y Damán a fines de ese año.
El 19 de junio de 1952 cedió otra porción del territorio para la erección de la diócesis de Alleppey mediante la bula Ea Redemptoris.[8] Al mismo tiempo, la parte sur de la diócesis, debido a la distancia de la sede episcopal, fue concedida en administración a los obispos de Trivandrum; esta disposición quedó definitiva el 20 de mayo de 1955 con el decreto Per Decretum.[9]
Originalmente sufragánea de la arquidiócesis de Goa y Damán, el 19 de septiembre de 1953, en virtud de la bula Mutant res del papa Pío XII, pasó a formar parte de la provincia eclesiástica de Verapoly.[10]
Estadísticas
De acuerdo al Anuario Pontificio 2022 la diócesis tenía a fines de 2021 un total de 176 680 fieles bautizados.
↑(en latín) Breve Ex munere, en Bullarium pontificium Sacrae congregationis de propaganda fide, tomo V, Roma, 1841, p. 120.
↑(en latín) Breve Multa praeclare, en Bullarium pontificium Sacrae congregationis de propaganda fide, tomo V, Roma, 1841, p. 164.
↑El significado y las consecuencias del breve Multa praeclare son debatidos: no está claro si el breve suprimió la diócesistout court, o si restó los territorios, en ese momento bajo el dominio inglés, de la jurisdicción de las diócesis de Padroado atribuyendo jurisdicción a los vicariatos apostólicos. Véase Giacomo Martina, Pio IX (1851-1866), Roma, 1985, pp. 376-385 (en particular p. 383). Ya en el siglo XVII Roma y Lisboa tenían una visión diferente de la aplicación de los derechos de patronato: para el Santa Sede Portugal sólo podía ejercer legítimamente los derechos de patronato sobre los territorios que formaban parte en el siglo XIX del propio imperio colonial; para Lisboa las viejas concesiones de finales del siglo XV todavía tenían valor legal, por lo que el Padroado se extendía, en principio, desde Brasil hasta Japón, incluso en aquellos territorios que mientras tanto habían pasado bajo los dominios coloniales británico, francés y holandés.