Meine Seufzer, meine Tränen, BWV 13Meine Seufzer, meine Tränen, BWV 13 (Mis suspiros y mis lágrimas) es una cantata de iglesia escrita por Johann Sebastian Bach en Leipzig para el segundo domingo después de la Epifanía y estrenada el 20 de enero de 1726.[1][2][3][4][5][6] HistoriaBach compuso esta obra durante su tercer año como Thomaskantor en Leipzig para el segundo domingo después de la Epifanía. La cantata fue interpretada por primera vez el 20 de enero de 1726.[1][2] AnálisisTextoLas lecturas establecidas para ese domingo eran de la epístola a los romanos, "tenemos diversos dones" (Romanos 12:6-16), y del evangelio según San Juan, las bodas de Caná (Juan 2:1-11). El texto está tomado del anuario de cantatas de Georg Christian Lehms, publicado en Darmstadt en 1711. La única idea que se toma del evangelio son las palabras de Jesús: "Aún no ha llegado mi hora". El texto se divide en dos partes con tres movimientos cada una, la primera trata sobre la angustia de alguien que se siente abandonado, la segunda sobre la esperanza en la ayuda de Dios. Ambas partes concluyen con un coral. El tercer movimiento es la segunda estrofa del himno "Zion klagt mit Angst und Schmerzen" de Johann Heermann,[7] el coral de cierre es la estrofa final de "In allen meinen Taten" de Paul Fleming.[8] Conforme a Alfred Dürr, es poco probable que fueran interpretadas antes y después del servicio, teniendo en cuenta la brevedad de la obra.[2][9] InstrumentaciónLa obra está escrita para cuatro solistas vocales (soprano, alto, tenor y bajo) y un coro a cuatro voces; dos flautas dulces, oboe da caccia, dos violines, viola y bajo continuo.[2][3][5] EstructuraConsta de seis movimientos.[4][6]
La cantata se inicia con un aria, un lamento acompañado por suaves flautas dulces y el oscuro sonido del oboe da caccia que con frecuencia es el que conduce. Se trata de una forma da capo, pero la sección central se divide en dos partes. En ella, la voz ilustra el "Weg zum Tod" (camino hacia la muerte) mediante varios saltos descendentes.[2] Dürr indica que esta composición "muestra cómo la imaginación del músico barroco es particularmente encendida por textos relativos a los suspiros y al dolor".[10] A continuación viene el breve recitativo secco que finaliza como un arioso en las palabras "vergeblich flehen" (suplicar en vano). En el coral, el viento madera toca el cantus firmus al unísono con la voz de alto, mientras la cuerda interpreta una figuración independiente en fa mayor, ilustrando la esperanza, aunque el texto dice que la esperanza aún no está a la vista. John Eliot Gardiner lo describe como "confiadas armonías diatónicas" a modo de "respuesta optimista sin palabras" a la "oración por el consuelo" de la voz.[10] Un segundo recitativo expresivo conduce a una segunda aria, que va acompañada por el violín y las flautas dulces, tocando al unísono una octava por encima. El texto de lamentación del comienzo "Ächzen und erbärmlich Weinen" (Gemir y llorar lastimosamente) se subraya mediante intervalos tales como segunda aumentada, quinta disminuida y séptima disminuida. El ritornello tiene dos partes marcadamente diferentes, una sección lastimera y otra esperanzada, repleta de escalas y pasajes rápidos. En la sección intermedia, el texto "wer gen Himmel siehet" (el que mira hacia el cielo) es acentuada por un salto de octava hacia arriba en la voz y escalas ascendentes en los instrumentos, en contraste con la línea descendente del movimiento 1. El coral final es un arreglo para cuatro voces de la melodía de "O Welt, ich muss dich lassen" de Heinrich Isaac, que aparece en dos ocasiones en la Pasión según San Mateo, BWV 244 de Bach, en los movimientos 10 (Ich bin's, ich sollte büßen) y 37 (Wer hat dich so geschlagen).[2][11] Discografía selectaDe esta pieza se han realizado una serie de grabaciones entre las que destacan las siguientes.[3][4]
Véase también
Referencias
Bibliografía
Enlaces externos
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