Este recital fue tal vez la presentación más importante en la extensa carrera del gran artista argentino, que se reencontró con gran parte de las bandas y músicos que lo acompañaron durante sus 40 años de trayectoria, frente a más de 40.000 espectadores.
La caja se editó por primera vez en 2010, incluyendo tres DVD y tres CD, más dos libros de fotos, pero esa edición era limitada, agotándose al poco tiempo.[2] Luego se reeditó en 2012 incluyendo una edición completamente rediseñada por el propio artista antes de su muerte.
La reedición contiene un libro de fotos y los tres CD con más de cinco horas del concierto que Spinetta ofreció el 4 de diciembre de 2009.[3]
El recital ha sido considerado histórico de manera general:
[El recital] quedará en la historia del Rock Argentino como el concierto más auténtico de nuestro país, para mí fue el Festival Spinetta y sus bandas eternas, una especie del BA Rock de aquellos años en dónde se hacían este tipo de encuentros, todas bandas argentinas y de diferentes estilos y con músicos de primera línea, todo esto gracias a Luis Alberto y su mundo. Impresionante y emotivo. Por suerte está todo filmado y grabado.
Un año antes del recital Spinetta había rechazado la posibilidad de hacer un recital retrospectivo que abarcara todas sus bandas:
A veces me reclaman por qué no hacemos una retrospectiva de todas las bandas y hacer un River pero no lo pienso así. Hay algo dentro de mí que se niega a aceptar el paso del tiempo como toda persona. A veces no querés aceptar que estás medio choto. Es muy posible que me entretenga haciendo más discos lindos, cada uno por sí mismo. Es una forma muy de corazón haber trabajado así. No trabajé pensando en las retrospectivas o pensando que puedo reunir a mis antiguos colegas y hacer un poco de Pescado, otro de Invisible. Lo quiero dejar para cuando alguien me tenga que llevar del brazo al escenario y quizás ya no pueda cantar pero no quiero hacerme pre homenajes ni cosas raras. Además los homenajes son para la gente que no está. Muchos amigos me dicen tenés que hacer un concierto con todos los temas de todas las épocas y festejar tus tantos años con la música y yo no lo veo ni cuadrado. Quiero poder hacer buenas canciones y llenar teatritos como estoy haciendo en todos lados que voy. Algún día por ahí hago un espectáculo donde haga una retrospectiva pero va a pasar bastante tiempo, años van a pasar y espero tener la fuerza para hacerlo bien en ese momento porque eso también es importante.
El diario Clarín publicó una crónica al día siguiente del concierto:
"¡Qué increíble escuchar 'Postcrucifixión' tocada por Pescado!", dice uno. "Uh, yo la última vez que los ví fue hace 26 años, en BA Rock", acota un desconocido algunos años más grande. "Invisible sigue siendo la banda más sólida del Flaco; Pescado, la más potente, y Almendra, la más emotiva". "Lo de Muchacha me pegó fuerte". "¡Qué tecladistas se llevó para Jade!". Voces de fanáticos.
El esfuerzo que exigió más de cinco horas de show se sintió en algunos temas, que no fueron correctamente interpretados y que fueron luego quitados del CD y el DVD, o que directamente decidieron no tocar en el recital:
"Nasty People" que lo tuvimos que sacar porque me equivoqué en todo. Fue un momento de crisis, de cansancio. Fue justo en la mitad del show y me desmoralicé brevemente en el intervalo. Ya con Invisible saqué de la lista "Encadenado al ánima" porque tenía un riff que lo tenía mitad aprendido y mitad agarrado y sabia que ya me había pasado en algo como "Nasty People" que lo había tocado un millón de veces. En todos los ensayos estaba correcta la estructura, salvo en el día del show. Me desmoralicé terriblemente, pensé que la gente me iba a abuchear. El frío de la noche y el cansancio me mellaron. Saqué "Seguir viviendo sin tu amor" y con Almendra sacamos algunos temas donde no estamos muy felices. Lo demás está todo mostrado con humildad, con amor y con un par de fotos en el libro que están tremendas.