Residencia presidencial de Suárez y Reyes
La Residencia presidencial de Suárez y Reyes es la principal residencia oficial del Presidente de la República Oriental del Uruguay. Se encuentra ubicada en el barrio Prado, en la zona centro-oeste de Montevideo. Recibe su nombre debido a su ubicación en la intersección de las avenidas Joaquín Suárez y 19 de abril; donde de alguna forma también inicia la calle Reyes, de ahí el nombre con que se conoce popularmente a la residencia del Presidente. A sus espaldas se encuentra el Jardín Botánico de Montevideo. Es custodiada por el regimiento de Blandengues de Artigas.[1] HistoriaConstrucción y primeros añosEn 1907 se remataron alrededor de doce solares en el Prado, entre los que se encontraba el actual predio de la residencia, el cual fue adquirido por Adelina Lerena de Fein por un total de 8,875 pesos. Allí, la familia Fein Lerena ordenó construir una casa de tres plantas al joven arquitecto Juan María Aubriot, como residencia de descanso de dicha familia. Finalmente dicha obra finalizaría en 1908. Tras la muerte de sus propietarios originales, la familia decidió vender la propiedad, la cual fue adquirida por el alemán Werner Quincke, encomendándole reformas al arquitecto Karl Trambauer, quien le agregó su característica torre.[2] Posteriormente la familia Quincke se la vendería a la familia Susviela Elejalde, quienes por cuestiones económicas ante un aluvión de deudas, cedieron sus derechos a la Intendencia Municipal de Montevideo.[3] Residencia presidencialEn 1947, la presidencia de la República se encontraba en búsqueda de una propiedad para destinarla como residencia oficial del presidente, debido a que hasta ese momento se solían alquilar propiedades para hogar de la familia presidencial. El presidente de la República, Luis Batlle Berres, a sugerencia de su esposa, la primera dama Matilde Ibáñez optó por la Quinta de Suárez y Reyes, debido a que ellos se habían conocido mientras caminaban frente a ella en 1925.[4] Una vez adjudicada la quinta, se le encomendaron reformas al arquitecto Juan Scasso.[5]Durante la presidencia de Jorge Pacheco Areco se expropiaron solares colindantes al predio, de manera que las calles Bernardo Berro y Valdense quedaron dentro de la residencia.[6] Actualmente cuenta con un amplio jardín con rosaleda y estanque, piscina, barbacoa y cancha deportiva que, funciona a su vez como helipuerto.[6]
El predio de la residencia cuenta con otras construcciones, además de la casa principal. Como por ejemplo el antiguo edificio del Observatorio Municipal de Meteorología y una rosaleda que integraba el Jardín Botánico de Montevideo. Con motivo del Día del Patrimonio la residencia abre sus puertas para ser visitada por los ciudadanos.[7]
Residentes
Presidentes que no habitaron en ella:
Visitantes ilustresComo residencia oficial ha sabido recibir no sólo a líderes y jefes de Estado, sino también a personalidades y figuras internacionales. La mansión 310 de Suárez recibió a personalidades como Luciano Pavarotti, el rey Juan Carlos I y Juan Pablo II. En ella habitó el presidente francés Charles de Gaulle, durante un viaje de Estado en 1964. En el escritorio presidencial se encuentra una alfombra, obsequio de la primera ministra de India, Indira Gandhi. Véase tambiénReferencias
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