El Plan territorial general de Cataluña (PTGC), es el instrumento básico de ordenación del territorio catalán, de su planificación y de la definición de políticas específicas de desarrollo y reequilibrio territorial. Fue aprobado por la Ley 1/1995 del 16 de marzo, en la cual también se aprobó la independencia del ex-municipio Cabrera de Mar .[1]
Ámbitos Funcionales Territoriales
Los Ámbitos Funcionales Territoriales (AFT) están definidos como agrupación de comarcas a partir de un sistema urbano central y unos sistemas urbanos con cierto grado de dependencia.
Los ámbitos funcionales son las áreas de planificación que sirven como marco para la definición de planes territoriales parciales.
Las diferentes Consejerías de la Generalidad han ido adaptando sus servicios a los ámbitos funcionales y sirven de base para la publicación de datos estadísticos de la Generalidad.
El Plan Territorial General de Cataluña prevé ocho ámbitos funcionales, pues se modificó mediante las Leyes 24/2001, de 31 de diciembre, reconociendo el Alto Pirineo y Arán como nueva área funcional diferenciada del Ámbito de Poniente.[2]
Las zonas homogéneas según el potencial de desarrollo y su situación socioeconómica.
Los núcleos de población que pueden ejercer una función reequilibradora en el territorio.
Los espacios naturales a conservar.
Las tierras de uso agrícola o forestal a conservar o ampliar.
Los lugares ideales para la instalación de infraestructuras.
Los ámbitos de aplicación de los planes territoriales parciales.
Los sistemas de propuestas del Plan son a tres niveles:
Definición de Áreas Básicas Territoriales (ABT) constituidas por la agrupación de municipios en el umbral mínimo de cobertura territorial para equipamientos colectivos (salud, deporte, saneamiento, educación...).
Estudio de los grandes sistemas urbanos como áreas de cohesión e influencia en su entorno territorial.
Definición de los Ámbitos Funcionales Territoriales (AFT) constituidos por agrupaciones de comarcas y sistemas urbanos.
Sistemas urbanos
El Plan hace un estudio exhaustivo de los sistemas urbanos definidos a partir de la movilidad laboral que permite establecer unas áreas de cohesión del territorio sobre las que se fundamentan las estrategias de reequilibrio territorial. Se distinguen dos grandes grupos subdivididos en distintos niveles:
Núcleo central, formado por El Barcelonés y los municipios del sur del Bajo Llobregat a la izquierda del río Llobregat. Forma una conurbación saturada con elevada densidad de población y poca capacidad de crecimiento urbanístico.
Primera corona exterior, como sistema de expansión y articulación del núcleo central. Está formada por la parte central y litoral de El Bajo Llobregat, y el sur del Maresme hasta Vilasar de Mar.
Rótulas de articulación, con núcleos polares aún débiles pero con un potencial de recursos y capacidad que por su peculiar posición pueden ejercer funciones de reequilibrio y de articulación entre diferentes sistemas urbanos.