María Ana Carlota de Saboya
María Ana de Saboya (Turín, 17 de diciembre de 1757-Nichelino, 11 de octubre de 1824) fue princesa de Saboya por nacimiento y duquesa de Chablais por su matrimonio con Benedicto de Saboya. Primeros añosNacida en el Palacio Real de Turín, durante el reinado de su abuelo, el rey Carlos Manuel III de Cerdeña. Fue la sexta hija del príncipe Víctor Amadeo III de Saboya y, desde 1773, rey de Cerdeña, con su esposa, María Antonia de Borbón, como hija de Felipe V. María Ana fue la cuarta hija superviviente de sus padres, aunque también la tercera. Sus dos hermanas mayores fueron las futuras "nueras" de Luis XV de Francia , la princesa María Josefina de Saboya, que se casó con el futuro Luis XVIII de Francia en 1771, y la princesa María Teresa de Saboya, que se casó con el futuro Carlos X de Francia en 1773. Su hermana menor superviviente, María Carolina, se casó con Antonio I de Sajonia.[1] Tres de sus hermanos fueron los tres últimos reyes de Cerdeña de la línea superior de la Casa de Saboya: el futuro Carlos Manuel IV, Víctor Manuel I y Carlos Félix. Tras la muerte del último en 1831 sin descendencia, el trono pasó a Carlos Alberto de Cerdeña, príncipe de Carignano y próximo heredero varón legítimo. MatrimonioDespués de los matrimonios de sus hermanas mayores con los príncipes franceses, María Ana se casó con su tío, el príncipe Benedicto de Saboya, duque de Chablais, quién era hijo menor de su abuelo, Carlos Manuel III, y de su última esposa, Isabel Teresa de Lorena. No tuvieron hijos, pero a pesar de eso fue un matrimonio feliz. Aunque estaban unidos y ella lo amaba, siempre lo vio como su tío.[2] Su marido era conocido por ser un buen soldado, a quién se le dio el control del Ejército italiano para contener las tropas francesas y con la intención de restaurar la monarquía en Francia después de la ejecución de Luis XVI en 1793.[3][4] También gozaba de una buena relación con sus cuñadas, la francesa Clotilde, princesa de Piamonte, y la austriaca María Teresa, duquesa de Aosta.[5] Años posterioresTras la ocupación francesa por Napoleón, en diciembre de 1798, toda la familia real de Cerdeña se exilió. Los duques de Chablais partieron de Turín hacia Cerdeña, donde permanecieron hasta finales de 1799 y luego abandonaron la isla y se trasladaron a Roma, en los Estados Pontificios. En 1805, pasaron unos meses en Florencia, invitados por María Luisa de Borbón, la cual era regente del Reino de Etruria.[6] En Italia, el duque de Chablais recibió el mando del Ejército de Italia, que contaba con tropas francesas y se proponía restaurar la monarquía en Francia tras la ejecución de Luis XVI en 1793.[7] Participó en la batalla de Loano. Benedicto, duque de Chablais, murió el 4 de enero de 1808 en Roma. En 1816, la ahora duquesa viuda de Chablais recibió a su hermano menor Carlos Félix y a su primo Carlos Alberto. Ya en ese momento, Napoleón había sido derrotado del trono francés y exiliado, por lo tanto, se recuperaron las haciendas y propiedades de la Casa de Saboya; durante la ausencia de María Ana, el Palacio Chiablese fue utilizado por Camilo Borghese y su esposa, la famosa Paulina Bonaparte. Sin embargo, María Ana no regresó a su país natal de inmediato: en 1820, compró la Villa Rufinella en Frascati, cerca de Roma, tras haber comprado la propiedad a Luciano Bonaparte. En 1822, a pesar de las protestas de su hermano y primo, María Ana se mudó a Florencia, a pesar de que la ciudad participaba activamente en el período de disturbios en el Reino de Cerdeña el año anterior.[6] MuerteSólo a principios de 1824 María Ana regresó al Piamonte, donde en el Castillo de Moncalieri se reunió con sus hermanos, el antiguo rey Víctor Manuel I y el nuevo monarca Carlos Félix. En el verano de ese mismo año, junto con Carlos Félix y su esposa María Cristina de Borbón-Dos Sicilias, realizó un viaje a Saboya, donde visitaron la Abadía de Hautecombe.[6] María Ana murió, poco después que su hermano Víctor Manuel I, en la Palazzina di caccia de Stupinigi en Turín en 1824, a la edad de 66 años y fue enterrada en la Basílica Real de Superga. Legó todas sus propiedades, incluidos el palacio Chiablese, el Castillo ducal de Agliè y la Villa Rufinella en Frascate, a su hermano Carlos Félix.[6] Había sobrevivido a su marido por 16 años. Títulos y tratamientosEsta tabla aún no está actualizada. Puedes contribuir aportando información sobre títulos y tratamientos de esta persona. Ancestros
Referencias
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