Ante la inminente llegada del Presidente de la Nación, el gobernador de una provincia diseña un plan para que se eliminen de las calles a todos los vagabundos y borrachos.
«La cámara dirigida por Rogelio Pardo recorrió uno por uno gestos, palabras de los personajes…se internó en los vericuetos de la ciudad…La redada es dura, irónica. Hermosa. Recorte de la memoria sin golpes bajos, arranca suspios profundos que se plasman en el ¿ Será posible ? tornado cotidiano para los argentinos. Desgraciadamente.»
«La anécdota más allá de los aditamentos y adaptaciones que la imaginación pudo haber agregado, relata con un lenguaje tragicómico, apelando al grotesco y por momentos a la manera de un gran romance popular, la historia de mendigos…que personifican la miseria y la marginación.»
Manrupe y Portela escriben:
«Pardo eligió la estética de lo marginal y lo lumpen para su opera, apelando a un tema poco común con el fin de tratar la época del Proceso en 1976. Realizada con dificultades que no se notan, el producto final termina resultando interesante prima.»
Manrupe, Raúl; Portela, María Alejandra (2001). Un diccionario de films argentinos (1930-1995). Buenos Aires, Editorial Corregidor. p. 500. ISBN950-05-0896-6.