Hongo coprófiloSe denomina hongo coprófilo (hongo que prefiere el estiércol)[1] a aquellos hongos saprotróficos que crecen sobre estiércol animal. Las resistentes esporas de las especies coprófilas son consumidas involuntariamente por los herbívoros de la vegetación, y se excretan junto con la materia vegetal. Los hongos luego brotan en las heces, antes de liberar sus esporas en el área circundante. Ciclo vitalLos hongos coprófilos liberan sus esporas a la vegetación circundante, que luego es devorada por animales herbívoros. Las esporas permanecen en el animal a medida que las plantas son digeridas, pasan a través de los intestinos del animal y finalmente se defecan. Los cuerpos fructíferos de los hongos crecen a partir de las heces del animal.[2] Es esencial que las esporas de la especie lleguen al nuevo material vegetal; las esporas que quedan atrapadas en las heces no producirán nada. Por ello, algunas especies han desarrollado medios para descargar esporas a gran distancia.[3] Un ejemplo de ello es el género Pilobolus. Los cuerpos fructíferos de Pilobolus se rompen de manera repentina, enviando el contenido a más de 2 metros de distancia.[4] Las heces de los animales proporcionan un ambiente rico en material nitrogenado, así como varias enzimas del sistema digestivo del animal. Las esporas mismas sobreviven a la digestión al tener paredes particularmente gruesas, lo que les permite germinar en el estiércol con mínima competencia de otros organismos.[2] Esta pared gruesa a menudo se rompe durante la digestión, preparando la espora para la germinación.[1] Las esporas son tan resistentes que las muestras de estiércol seco pueden luego rehidratarse, permitiendo que el hongo fructifique semanas más tarde.[5] DistribuciónLa distribución de hongos coprófilos está estrechamente relacionada con la distribución de los herbívoros de los que dependen, como conejos, ciervos, vacas, caballos y ovejas.[2] Algunas especies dependen de una especie específica para el estiércol; por ejemplo, Coprinus radiatus y Panaeolus campanulatus crecen casi exclusivamente en estiércol de caballo,[6] mientras que otros, como Panaeolus sphinctrinus, pueden crecer en cualquier clase de heces o incluso en suelos particularmente fértiles.[6] Además, algunas especies (como Conocybe rickenii) se pueden encontrar en grandes cantidades en áreas donde el estiércol se ha utilizado como fertilizante del suelo, como en jardines.[7] También se sabe que algunos hongos coprófilos crecen en excremento de omnívoros (como Chaetomium globisporum de excrementos de rata) o incluso carnívoros (como Chaetomium rajasthanense, de heces de tigre).[8] Especies con cuerpos fructíferosSi bien no todas las especies coprofilas de hongos poseen cuerpos fructíferos, hay muchas que si los tienen especialmente de los géneros Coprinopsis, Panaeolus y Deconica.[1] Las especies conocidas son:
Véase tambiénReferencias
Bibliografía
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