Francisco Solano López (Buenos Aires, 26 de octubre de 1928[1] - Buenos Aires, 12 de agosto de 2011)[2] fue un dibujante y artista argentino. Está ampliamente considerado como uno de los dibujantes más importantes de la historieta argentina, siendo El Eternauta su obra más reconocida. Comparte nombre con el antiguo presidente paraguayoFrancisco Solano López (1826-1870), de cuyo hermano Venancio era descendiente.[3]
Biografía
La carrera de Solano López se inicia en 1953, cuando comienza a trabajar en la Editorial Columba con el guionista Roger Plá para realizar la historieta Perico y Guillermina.
En la editorial, Oesterheld se ponía de acuerdo con los dibujantes acerca de las historietas en las que debían trabajar. Solano López pidió ilustrar una serie de ciencia ficción, pero con un tono más realista que sus trabajos anteriores. Esto llevó a la publicación de El Eternauta, que, aunque presenta elementos del género como invasiones extraterrestres o armamentos fantásticos, no pone el acento en éstos sino en las reacciones de personas comunes ante una terrible tragedia. La serie se comenzó a publicar en Hora Cero semanal el 4 de septiembre de 1957, y se extendió hasta el número 106, dos años después. Esta historieta fue reeditada en numerosas ocasiones a lo largo del tiempo, e incluso Oesterheld la recreó en 1969 con ilustraciones de Alberto Breccia.
Solano se mudó a Europa en 1963, en donde trabajó para la editorial Fleetway en Galaxus, Kelly Ojo Mágico, Adam Eterno, Profesor Kraken, etc. En 1968, regresó al país y volvió a trabajar para Columba.
El éxito de las reediciones de El Eternauta lo reunió de nuevo con Oesterheld, en 1976, en El Eternauta II, para la revista Skorpio. Y ese mismo año comenzó también a colaborar con Ricardo Barreiro, en la historieta Slot Barr.
Cuando, pese a su oposición, su hijo menor comenzó a militar en Montoneros, temiendo por su vida, en 1977 emigra con su familia a España.[4] Allí creó Ana e Historias tristes.
Luego se muda a Río de Janeiro y trabaja a distancia para editoriales estadounidenses, y continúa al regresar a Buenos Aires. Abarca diversos géneros, y comienza a trabajar con Pablo Maiztegui, quien firmaba como "Pol". Junto a él, en 1977, vuelve a realizar El Eternauta, con el episodio "El Mundo Arrepentido". Situada tras el final de la primera versión, relata uno de los incontables viajes que el protagonista asegura haber realizado antes de aparecer frente al guionista ante quien relató la historia original de El Eternauta. Fue publicada en la revista Nueva, editada en el interior del país, y más adelante fue recopilada.
En 1980, dibuja la serie bélica Águila Negra, con guion de Ray Collins, para Nippur Magnum de Columba. En Superhumor publicó Calle Corrientes, con guion de Guillermo Saccomano. Con el regreso de la democracia en la Argentina, publica en la revista Fierro las historietas Ministerio, El Instituto y El televisor, con guiones de Ricardo Barreiro. Y también ilustró a Evaristo, con guiones de Carlos Sampayo, una versión en historieta del entonces célebre comisario Evaristo Meneses
Durante 2001 vuelve a retomar El Eternauta, esta vez con una historia más ambiciosa. Omitiendo por completo la continuación de la segunda parte, se sitúa 40 años en el futuro en una Buenos Aires reconstruida por los invasores, donde masivos lavados cerebrales a los sobrevivientes hicieron a la gente creer que la llegada fue pacífica, y sólo unos pocos rebeldes conocen la verdad de la invasión. La intención de los autores fue retratar una forma diferente de dominación, basada no en el poderío militar sino en la manipulación de las masas. Solano López lo explicaba así:
Estamos echando una mirada sobre la actualidad, basados en una metáfora explícita: el país invadido por extraterrestres, que son en realidad las finanzas internacionales. En esta parte nos interesó mostrar cómo lograron los invasores perpetuar la dominación a través de los mecanismos de la democracia. Tal como pasó en América Latina con Collor de Melo, Alan García o Menem.
Se comenzó a editar en julio de 2003, en nueve entregas.
Dada su buena recepción, se continuó con una nueva parte, La búsqueda de Elena (la esposa de Juan Salvo, perdida al final de la primera historia), de seis números publicados a partir de abril de 2006, junto a una reedición de Marcianeros. Estaba previsto el final en el 2007, pero llegó a publicarse recién en 2010 en tres entregas.
El 9 de octubre de 2008 Francisco Solano López fue declarado «personalidad destacada de la cultura» de la Ciudad de Buenos Aires por iniciativa del Legislador Julián D´Angelo.[5] La ceremonia tuvo lugar en el salón San Martín del palacio legislativo.
Francisco Solano López falleció durante la madrugada del viernes 12 de agosto de 2011 luego de haber sufrido una hemorragia cerebral de la que no se pudo recuperar. En 2012, la Fundación Konex le otorgó un Diploma al Mérito post mortem por su gran trayectoria como humorista gráfico.
↑«Descendiente del homónimo militar y presidente paraguayo, héroe de la Guerra de la Triple Alianza...», en El Eternauta: 50 años, describiendo al dibujante.