Eleuterio de Tournai
San Eleuterio de Tournai (del francés: Éleuthère) (f. 532) fue un santo venerado y considerado el primer obispo de Tournai.[1] La Enciclopedia Católica escribe que «históricamente hay muy poco conocimiento sobre san Eleuterio, pero que fue sin duda el primer obispo de Tournai».[1] La tradición dice que era amigo de San Medardo, y los dos santos fueron cortesanos antes de obispos.[1] Eleuterio fue nombrado probablemente obispo de Tournai después de San Remigio organizando la jerarquía ecelesiástica del norte de la Galia al final del siglo V.[1][2][3] MartirioEleuterio fue venerado como mártir aunque la leyenda es considerada una invención del sacerdote Enrique de Tournai, que escribió una vita de Eleuterio en 1141.[1] A finales del siglo XI, la Iglesia de Tournai pretendía la independencia de la diócesis de Noyon, y Enrique estuvo motivado para demostrar la antigüedad de la Iglesia de Tournai.[1] Catholic Online repite la leyenda de que un «grupo de arrianos, furiosos por su predicación, le golpearon severamente, muriendo algunas semanas más tarde»[4] Los escritos de Enrique de Tournai establecen que Eleuterio era nativo de Tournai, y que nació durante el reinado de Childerico I. Los padres de Eleuterio eran cristianos y se llamaban Tereno y Blanda; Tereno era descendiente de la familia de Ireneo de Lyon. Los perseguidores de los cristianos obligaron a la familia a emigrar a una villa llamada Blandinium, pero después de la conversión de Clodoveo I a la Cristiandad, la familia construyó una iglesia en Blandinium. Eleuterio eventualmente se convirtió en obispo de Tournai, y fue consultado por el papa Hormisdas para erradicar el arrianismo. Eleuterio, de acuerdo con el concilio, luchó contra los arrianos. Un día, mientras se dirigía a la iglesia, fue atrapado por un grupo de éstos, que lo dejaron medio muerto. Murió a causa de las heridas que recibió.[1] VeneraciónExiste un testimonio sobre sus reliquias durante el obispado de Hedilo de Tournai, en 897 u 898.[1] El obispo Baudoin trasladó las reliquias del santo en 1064 o 1065.[1] Volvieron a ser trasladados en 1247,[1] por orden del obispo Walter de Marvis. El monasterio de San Martín en Tournai y la catedral de Brujas también reclaman la legitimidad de poseer las reliquias del santo.[1] ReferenciasEnlaces externos |