El Colegio de Nuestra Señora de Belén fue una institución educativa de la Compañía de Jesús en Barcelona, hoy desaparecida.
Historia
Los orígenes del colegio se remontan a 1545, cuando se dispuso un precario colegio jesuita en la ciudad por los padres Antonio de Araoz y Pedro Fabro. Este primer asentamiento se encontraba cercano a la universidad. Gracias a la ayuda de la familia Borja, el colegio pasó a asentarse en unos terrenos comprados del otro lado de la Rambla, frente a la segunda muralla de la ciudad.
En 1573 el colegio fue refundado gracias al patronazgo de doña María Manrique de Lara y Cardona, hija de Antonio Manrique de Lara, II duque de Nájera y su esposa Juana Folch de Cardona.[1]
El siglo XVII vería el asentamiento del colegio.[4] En el año 1681 se puso la primera piedra de las obras de construcción de una nueva iglesia, de gusto plenamente barroco. Esta nueva iglesia fue consagrada en 1729 aunque no se finalizaría hasta tres años después.
El Colegio desaparecería con la expulsión de los jesuitas de España en 1767. Sus edificios pasaron a albergar el Seminario Conciliar de la diócesis de Barcelona.[5]
Descripción
Interior de la iglesia que había sido del colegio hacia 1926Vista de la manzana del antiguo colegio, con la planta de la iglesia y antiguo colegio, cuando ya era seminario conciliar (en 1861 según los Quarterons de Miguel Roca y Garriga)
El colegio tenía como templo la iglesia de Belén, hoy conservada. Al noroeste de la iglesia se extendía el edificio del colegio que contaba con un amplio patio cuadrado con flancos porticados.
De acuerdo con el jesuita Francisco Javier Fulviá, el colegio albergaba la espada que San Ignacio había ofrecido a la Virgen María en Manresa, así como otros objetos del santo venerados como reliquias.[6]
↑Vila Despujol, Ignacio (2018). La Compañía de Jesús en Barcelona (1600-1659): el Colegio de Nuestra Señora de Belén se consolida. Biblioteca universitària. Edicions de la Universitat de Barcelona. ISBN978-84-9168-138-0.|fechaacceso= requiere |url= (ayuda)