Hija de Hélène Rogers, perteneciente a una familia de comerciantes estadounidenses de Nápoles y de Charles Gustave Imer, un rico comerciante de origen suizo afincado en Marsella, se formó en el taller de Émile Aldebert. Firmó como Berthe Imer hasta su matrimonio en 1893 con el pintor y grabador Paul-Armand Girardet, descendiente de una familia de artistas suizos, los Girardet, originarios de la ciudad de Le Locle.
Especializada en retratos, bustos y esculturas de grupo de medio cuerpo, tras perder a uno de sus hijos en la I Guerra Mundial, gran parte de su producción se orienta a la conmemoración de las víctimas del conflicto y los motivos religiosos.[1]
Expuso con regularidad en el Salon des Artistes Français hasta 1944, donde recibió una mención de honor a principios de siglo, y fue reconocida con una medalla de oro en la Exposición Universal de 1900, celebrada en París. Perteneció a la Société des Artistes Français y a la Unión de Mujeres Pintoras y Escultoras. [2]Está enterrada en el cementerio nuevo de Neuilly-sur-Seine (Hauts-de-Seine) y una calle de Marsella, su ciudad natal, lleva su nombre. [1]