Skotos (mitología)En la mitología griega Skotos (en griego Σκότος, la «Oscuridad»), es una fuerza o deidad primordial, asociada a la cosmogonía de Alcmán. Se trata de las Tinieblas primordiales, en alusión a otos mitos de la creación, y tiene como parelo a Érebo, más utilizado en la mitología, y a la Calígine, mencionado por Higino. Sófocles dice que las Erinias, temibles diosas, son hijas de Evónime (la Tierra) y de lo Oscuro (Skotos).[1] El vocablo σκότος, de género neutro, significa «tinieblas, oscuridad, negrura, sombra», y ha dado en español, por ejemplo, la voz escotofobia (miedo a la oscuridad). En uno de los papiros de Oxirrinco, que contiene la cosmogonía propuesta por Alcmán, dice que al principio se establecieron varias fuerzas:
Por el comentario del texto se sabe que se proponía una fase más antigua en que había una «materia» o sustancia original confusa y mezclada. De ella surgían Poros, el sendero del camino, y Tecmor, la meta del camino. Más tarde se ubicaría una ulterior diferenciación, operada por Tetis (Thesis), la diosa o fuerza divina que traería el orden al cosmos, inicialmente confuso y desordenado.[2] El poder de los tres conceptos primordiales —Thesis, la creación; Poros, el camino, y Tecmor, el final—, acabaría formando a otra generación de dioses primordiales: el día (ἆμαρ, amar), la luna (σέλανα, selana), la obscuridad (σκότος, skótos); también los destellos o estrellas (μαρμαρυγαί, marmarugas) y el sol (ἥλιος)».[3][2] Que se cite a Skotos dos veces en el poema plantea ciertas dudas pero algunos estudiosos creen que σκότος es el tercer elemento del trío ἆμαρ y σέλανα, el día y la luna, fuerzas inertes que el comentarista utiliza desde un punto de vista aristotélico.[4] West cree, en cambio, que la Oscuridad nació junto a Poros y Tecmor y no después, pues no tiene sentido incluirla naciendo después de haberse hecho la luz. La Oscuridad ocupa el puesto en la cosmogonía de Alcmán que en otras cosmogonía ocuparía la Noche.[3] Vernant opina que la relación de Skotos con Tetis hace de esta una especie de representación de las aguas oscuras o profundidades marinas; no en vano uno de los epítetos de la nereida es cianea (κυάνεα).[5] Referencias
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