Inflamación sistémica

La inflamación sistémica crónica (SI) es un estado de inflamación de bajo grado que puede persistir durante largos períodos y afectar a todo el organismo.[1]​ Se produce como resultado de la liberación de citocinas proinflamatorias de las células relacionadas con el sistema inmune y la activación crónica del sistema inmunitario innato. Puede contribuir al desarrollo o progresión de ciertas condiciones mediadas por inflamación, como pueden ser enfermedades cardiovasculares, diabetes tipo 2, cáncer, enfermedades neurodegenerativas, artritis reumatoide y otros problemas de salud.[2][1]

Cuando se produce como consecuencia del envejecimiento (una de sus causas principales) se la conoce también como inflamm-aging o inflamación senil.[1]

Mecanismos o causas

La liberación de citocinas proinflamatorias y la activación del sistema inmune innato pueden ser el resultado de factores externos (agentes biológicos o químicos) o internos (mutaciones/variaciones genéticas)ː

  • Factores externosː incluyen infecciones virales y bacterianas, alérgenos o toxinas en los alimentos que comemos y en nuestro entorno, el tabaquismo y el consumo de alcohol.
  • Factores internosː incluyen la edad, estrés, trastornos del sueño, obesidad, afecciones autoinmunes y variaciones genéticas.[3][4]

Investigación

Si bien el SI puede ser inducido por múltiples factores externos, la investigación sugiere que la falta de control por parte de las células dendríticas tolerogénicas y las células T reguladoras (Treg) es posiblemente el principal factor de riesgo para el desarrollo del SI. En el funcionamiento de las respuestas inmunes, las células T-helper y T-citotóxicas se activan mediante la presentación de antígenos por las células presentadoras de antígeno (APC). Las principales son las células dendríticas (DC). Cuando un DC presenta un antígeno a una célula Treg, se envía una señal al núcleo del DC, lo que resulta en la producción de Indolamina 2,3-dioxigenasa (IDO). La IDO inhibe las respuestas de las células T al agotar el triptófano y producir kinurenina, que es tóxica para la célula.

Las personas susceptibles a desarrollar inflamación sistémica crónica parecen carecer del funcionamiento adecuado de las células Treg y los TDC. En estos individuos, la falta de control de los procesos inflamatorios produce múltiples intolerancias químicas y alimentarias, enfermedades autoinmunes y muchas otras complicacioes.

Véase también

Referencias

  1. a b c «Inflamación sistémica senil». Fisiología del Ejercicio. 24 de julio de 2023. Consultado el 15 de abril de 2024. 
  2. Sattar, Naveed; McCarey, David W.; Capell, Hilary; McInnes, Iain B. (16 de diciembre de 2003). «Explaining How “High-Grade” Systemic Inflammation Accelerates Vascular Risk in Rheumatoid Arthritis». Circulation (en inglés) 108 (24): 2957-2963. ISSN 0009-7322. doi:10.1161/01.CIR.0000099844.31524.05. 
  3. Warren, Sarah (19 de agosto de 2019). «What is Chronic Inflammation, and Why Is It Killing Us?». Somatic Movement Center (en inglés estadounidense). Consultado el 15 de abril de 2024. 
  4. Pahwa, Roma; Goyal, Amandeep; Jialal, Ishwarlal (2024). Chronic Inflammation. StatPearls Publishing. Consultado el 15 de abril de 2024.