Zenaida auriculata
La zenaida, tórtola, torcaza, torcaza nagüiblanca, tórtola orejuda, tórtola torcaza, zenaida torcaza, tórtola sabanera, paloma sabanera, torcaza común o palomita montera (Zenaida auriculata)[2]es una especie de ave columbiforme de la familia Columbidae propia de Sudamérica. Distribución geográficaVive comúnmente en Sudamérica habiendo aparecido pequeñas colonias en Trinidad y Tobago y las Antillas Neerlandesas. HábitatSe puede encontrar en lugares abiertos y arboledas, aunque se ha adaptado muy bien a las zonas urbanas. AnidaciónPuede nidificar tanto en la superficie, como en arbustos o árboles.[3] Pone dos huevos blancos que eclosionan en 12 a 14 días. CaracterísticasSe trata de un ave principalmente granívora, de unos 22 a 28 cm de largo.[4] Presenta una coloración parda que varía según la región corporal y posee unas características máculas negras en las terciarias y en las coberteras medianas y mayores internas. De corona grisácea, al igual que la cola, vientre y área cloacal. Cara, cuello y zona inferior parduzcos. Presenta una visible línea auricular negra. En el cuello se puede observar una mancha iridiscente color vino. Leve dimorfismo sexual; el macho posee una corona más gris y marca iridiscente más grande que la hembra. Es una ave gregaria y veloz, que se ha adaptado muy bien a las áreas urbanas.[3] SonidosRealizan un canto muy peculiar y muy distinto a otras aves que también utilizan para llamar a sus crías. Tanto macho como hembra cantan, esta última casi exclusivamente en el momento previo a alimentar a sus crías (adaptación al llamado). El macho canta con más fuerza y entonación que la hembra. El llamado a la pareja lo realizan inclinándose, apoyando el buche en el suelo y levantando la cola, desplegándola y exhibiendo su característico abanico degradado de las plumas timoneras, emitiendo al mismo tiempo un sonido similar al de una rana. El arrullo lo realizan irguiéndose, elevando la cabeza e inflando el buche para luego inclinarse manteniendo la mirada al frente, para tomar aire y volver a erguirse, repiten el movimiento algunas veces ciclicamente, emitiendo un canto corto y grave al mismo tiempo. Su sonido de alerta es similar a una exclamación de asombro, la realizan directamente (sin inflar el buche) y abriendo el pico, generalmente se quedan inmóviles, mirando fijamente hacia el lugar que disparó el alerta, mientras repiten el sonido. TaxonomíaSe reconocen 11 subespecies de Zenaida auriculata:[5]
Referencias
Bibliografía
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