Vaina foliarEn botánica, la vaina foliar es un ensanchamiento del pecíolo o de la hoja que envuelve el tallo como ocurre en las gramíneas y muchas apiáceas.[1] Puede rodear al tallo muy claramente, como es el caso de la vaina cuadrada de las gramíneas, o directamente no existir. Algunas vainas llevan una prolongación membranosa en su parte superior llamada lígula.[2] En las gramíneas, la vaina foliar nace en un nudo y envuelve a la caña, pudiendo ser más corta o más larga que el entrenudo. Frecuentemente la vaina esta hendida hasta su base, si bien sus bordes se superponen enrollándose alrededor de la caña, pero en muchas especies está parcial o totalmente soldada por sus bordes (como por ejemplo, en Bromus) e incluso la lígula puede formar un anillo continuo alrededor de la caña, como ocurre en Melica y en algunas especies de Poa. Las nervaduras de la vaina son numerosas y uniformes, si bien en especies con cañas comprimidas las vainas pueden presentar una carena conspicua.[3] Referencias
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