Ser liminarLos seres liminares son aquellos que no pueden clasificarse fácilmente en una sola categoría de existencia. Asociados al estado umbral de liminalidad, del latín līmen, «umbral»,[1] representan y destacan los límites semiautónomos del mundo social.[2] Los seres liminares son seres naturalmente ambiguos, que desafían las redes culturales de clasificación social.[3] Entidades liminaresEl antropólogo cultural Victor Turner consideraba que las entidades liminares, tales como aquellas que se someten a ritos de iniciación, aparecían a menudo en forma de monstruos, como una manera de representar la co-presencia de opuestos—alto/bajo; bueno/malo—en la experiencia liminar.[4] Los personajes liminares son estructural y socialmente invisibles, habiendo dejado un conjunto de clasificaciones y aún no entrando en otro.[5] La antropóloga social Mary Douglas ha resaltado los aspectos peligrosos de tales seres liminares,[6] si bien son también potencialmente benéficos. De esta manera, a menudo se encuentra una figura de chamán semihumano, o un poderoso mentor con aspectos animales, como un centauro, presidiendo la etapa liminar de un ritual.[7] LegendariosPor extensión, seres liminares de naturaleza mixta e híbrida aparecen regularmente en mitos, leyendas y fantasía. Los seres liminares legendarios son criaturas legendarias que combinan dos estados distintos de existencia simultánea dentro de un cuerpo físico. Esta perspectiva única puede proporcionar al ser liminal sabiduría y la capacidad de instruir o enseñar, lo que los convierte en mentores adecuados, a la vez que los hace peligrosos y misteriosos. Muchos seres en la fantasía y el folclore existen en estados liminares que son imposibles en seres reales: Híbridos (dos especies):
A la vez humanos y espíritus por sangre:
A la vez humanos y vegetales:
A la vez vivos y muertos:
A la vez humanos y máquinas:
A la vez humanos y extraterrestres:
A la vez seres humanos y deidades: Véase tambiénReferencias
Lecturas adicionales
Enlaces externos
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