Principio de no agresión

El principio de no agresión (o de no coacción o no invasión, abreviado PNA) es un principio ético y jurídico, paralelo al de propiedad de uno mismo, que sostiene que debe ser legal para cualquier individuo hacer lo que desee, siempre que no inicie ni amenace con iniciar violencia física contra otro individuo o su propiedad.[1][2][3]​ Afirma que la coacción —definida como el inicio de fuerza o violencia física, la amenaza de tal, o el fraude a las personas o sus bienes pacíficamente adquiridos— es intrínsecamente ilegítima y debe ser rechazada. El principio no se opone a la defensa contra la agresión, al contrario, la respalda y legitima.[4]

La no agresión es un principio que típicamente incluye la propiedad como parte del propietario; agredir contra la propiedad de alguien es agredir contra la persona porque sus bienes son de importancia para ella - el cuerpo es propiedad de sí mismo. De este modo, el principio lleva al rechazo del robo, vandalismo, violaciones, asesinatos y fraudes. Cuando se aplica a los gobiernos, se ha adoptado para impedir muchas políticas incluidos impuestos y proyectos militares. Cuando se lleva a su consecuencia lógica (caso de los anarquistas), llama a la abolición del Estado (al ser una institución involuntaria y coactiva) y a proteger a las personas de la agresión de este sobre su soberanía individual.

Este principio está presente en algunas filosofías como el iusnaturalismo y el utilitarismo, e ideologías de corte anarquista y, especialmente, en el liberalismo libertario y el anarcocapitalismo, donde este principio ha sido desarrollado sistemáticamente.

Historia

El principio de no agresión ha existido en diversas formas, en su contenido como en su estructura. El principio se remonta hasta la Antigüedad y luego popularizado por los pensadores libertarios como Ayn Rand y Murray Rothbard.[5]

Varios autores han creado su propia formulación del principio de no agresión, como se muestra en la siguiente tabla.

Formulaciones históricas del principio de no agresión
Año Autor Formulación
1689 John Locke Locke da la siguiente versión del PNA: "Siendo todos iguales e independientes, nadie debe dañar a otro en su vida, salud, libertad o posesiones".[6]
1785 Immanuel Kant En la obra Fundamentación de la metafísica de las costumbres (1785) Kant expone diversas formulaciones del imperativo categórico, que es la estructura formal (no necesariamente de contenido) para la aplicación universal del principio de no-agresión:

«Obra solo según aquella máxima por la cual puedas querer que al mismo tiempo se convierta en ley universal. Obra como si la máxima de tu acción pudiera convertirse por tu voluntad en una ley universal de la naturaleza» (AA IV:421). «Obra de tal modo que uses a la humanidad, tanto en tu persona como en la persona de cualquier otro, siempre al mismo tiempo como fin y nunca simplemente como medio» (AA IV:429).

1816 Thomas Jefferson Jefferson describe el PNA en una carta a Francis Gilmer: "La libertad legítima es una acción sin obstáculos de acuerdo con nuestra voluntad dentro de los límites que nos rodean por la igualdad de los derechos de los demás." No añado "dentro de los límites de la ley" Porque la ley es a menudo la voluntad del tirano, y siempre así cuando viola los derechos del individuo ". Y "Ningún hombre tiene el derecho natural de cometer la agresión en la igualdad de los derechos de los demás, y esto es todo de lo que las leyes deben restringirlo".[7][8]
1851 Herbert Spencer Spencer fórmula el PNA como: "Todo hombre es libre de hacer lo que él quiere, siempre que no infrinja la libertad igual de cualquier otro hombre."[9]
1859 John Stuart Mill En su libro On Liberty Mill declara el PNA de la siguiente manera: "el único propósito por el cual el poder puede ser ejercido legítimamente sobre cualquier miembro de una comunidad civilizada, contra su voluntad, es prevenir el daño a otros".[10]
1923 Albert Jay Nock En el segundo capítulo de su libro, Our Enemy, the State, Nock se refiere a una antigua formulación del PNA por el legendario rey Pausole, que lo declaró como dos leyes. La primera ley fue "no herir a ningún hombre" y la segunda fue "entonces haz lo que quieras".[11]
1961 Ayn Rand En un ensayo titulado Los derechos del hombre en el libro La virtud del egoísmo formuló: "La condición previa de una sociedad civilizada es la restricción de la fuerza física de las relaciones sociales... En una sociedad civilizada, la fuerza solo puede usarse en represalia y solo contra aquellos que inicien su uso ".[12][13][14]
1963 Murray Rothbard "Nadie puede amenazar o cometer violencia (agresión) contra la persona o la propiedad de otro, la violencia solo puede emplearse contra el hombre que comete tal violencia, es decir, solo defensivamente contra la violencia agresiva de otro. No puede ser empleada contra un no agresor: he aquí la regla fundamental a partir de la cual se puede deducir todo el corpus de la teoría libertaria". Citado de La guerra, la paz y el Estado (1963), que apareció en El igualitarismo como revuelta contra la naturaleza y otros ensayos.[15]
1974 Robert Nozick En su obra Anarquía, Estado y utopía formula los principios para la justa distribución de los bienes "El primero es el principio de la justa adquisición. Bajo este principio, los individuos pueden adquirir cualquier propiedad que deseen siempre y cuando no haya sido previamente poseída y no sea tomada por robo, coacción o fraude. El segundo es el principio de transferencia justa por el cual la propiedad puede intercambiarse siempre que la transferencia no se ejecute (nuevamente) por robo, fuerza o fraude".

Véase también

Referencias

  1. La propiedad sobre uno mismo Archivado el 16 de octubre de 2008 en Wayback Machine., por Francisco Capella
  2. Francisco Capella (19 de julio de 2007). «Libertad, derecho de propiedad y principio de no agresión». Instituto Juan de Mariana. 
  3. «Principio de no agresión | Carlos Felipe Law Firm». Consultado el 15 de octubre de 2023. 
  4. "La filosofía gira en torno a la “soberanía del individuo”—como Josiah Warren, un adelantado, lo expresaba. Ya sea que usted prefiera el término “la propiedad de uno mismo” o “el principio de no-invasión”, la base de la filosofía sigue siendo la misma. La idea es la de que cada individuo pacífico debe estar en libertad para disponer de su persona, tiempo, y propiedad como a él le plazca. La fuerza es permitida solamente en defensa propia y solamente cuando se encuentra dirigida al (a los) ofensor (es) individual (es)", Wendy McElroy, Anarquismo: dos especies
  5. «Non-Aggression Principle en Libertarianism.org». 
  6. John Locke. «Principle of Non-Aggression». Archivado desde el original el 30 de enero de 2011. Consultado el 24 de junio de 2017. 
  7. Thomas Jefferson. «Principle of Non-Aggression». Archivado desde el original el 30 de enero de 2011. Consultado el 24 de junio de 2017. 
  8. Thomas Jefferson. «Extract from Thomas Jefferson to Francis Walker Gilmer, 7 June 1816». Jefferson Quotes & Family Letters. Thomas Jefferson Foundation. Consultado el 24 de junio de 2017. 
  9. Herbert Spencer. «Principle of Non-Aggression». Archivado desde el original el 30 de enero de 2011. Consultado el 24 de junio de 2017. 
  10. John Stuart Mill. «Principle of Non-Aggression». Archivado desde el original el 30 de enero de 2011. Consultado el 24 de junio de 2017. 
  11. Albert J. Nock. «Our Enemy, the State». Archivado desde el original el 12 de septiembre de 2017. Consultado el 24 de junio de 2017. 
  12. Ayn Rand. «The Nature of Government (December 1963, from The Virtue of Selfishness, 1961, 1964)». Archivado desde el original el 14 de octubre de 2011. Consultado el 24 de junio de 2017. 
  13. Ayn Rand. «The Roots of War (June 1966, excerpts)». Consultado el 24 de junio de 2017. 
  14. Ayn Rand. «Faith and Force: The Destroyers of the Modern World (1960, 1967, excerpts)». Consultado el 24 de junio de 2017. 
  15. Murray N. Rothbard. «War, Peace, and the State (April 1963)». Consultado el 24 de junio de 2017. 

Enlaces externos