Los 8 mejores equipos de cada conferencia se clasifican para los playoffs.
Los cuatro mejores clasificados son los tres campeones de división más el siguiente mejor equipo en cuanto a balance de victorias-derrotas.
Los restantes 4 son elegidos según sus posiciones (mejor balance).
Las series se juegan a un formato al mejor de 7 partidos, en las que el equipo que posee la ventaja de campo disputará los partidos 1, 2, 5 y 7; mientras que el resto de partidos se jugarán en el pabellón del equipo contrario.
Excepción: Para las finales de la NBA se ha decidido que el equipo con ventaja de campo disputará los partidos 1, 2, 6 y 7, mientras que el otro jugaría en casa los partidos 3, 4 y 5.
Clasificación Playoff
Conferencia Este
Cleveland Cavaliers consiguió el mejor récord de la temporada (66 victorias, 16 derrotas), el mismo récord que consiguió Boston Celtics el año anterior. Debido a esta marca poseería ventaja de campo durante todos los partidos de playoff.
Por su parte los Lakers conseguirían el mejor récord en el Oeste. En los siguientes puestos se produciría un triple empate. Resuelto en favor de Denver Nuggets por haber ganando más partidos a sus rivales directos.
* - Campeón de división Negrita- Ganador de las series Cursiva- Equipo con ventaja de campo
Conferencia Este
Los partidos marcados con un asterisco (*) se jugarán en caso de ser necesarios. Los horarios de los partidos están en la hora de verano del Este (EDT), equivalente a UTC-4.
Los Cavaliers abrieron las series con una victoria aplastante en el partido 1, LeBron James consiguió 38 puntos y los Cavaliers ganaron de 18. En el segundo partido, los Cavaliers lideban por 27 puntos después del tercer cuarto antes de que los Pistons comenzaran una remontada en el último cuarto. Los Pistons fueron capaces de recortar a los Cavaliers hasta siete puntos, pero al final los Cavaliers ganarían por 12 puntos. El tercer partido estuvo marcado por un parcial de 18-2 conseguido por los Cavaliers en el último cuarto que aseguraba la victoria para los de Cleveland. Los Cavaliers barrieron a los Pistons con una convincente victoria en el partido 4, en la que Lebron James anotó 36 puntos acercándose sin éxito al tripe-doble durante los dos últimos partidos.
En el partido 1, con los Bulls ganando por un punto, el rookie Derrick Rose anotó dos tiros libres a falta de 9.6 segundos. El capitán de los Celtics, Paul Pierce, tuvo una oportunidad para ganar el partido con los tiros libres que debía realizar después de la falta recibida por parte de Joakim Noah, pero el falló el segundo después de meter el primero, llevando el partido al tiempo a la prórroga. En la prórroga, con Rose expulsado por faltas, Tyrus Thomas anotó seis puntos de los ocho que anotarían los Bulls poniendo el marcador en 105–103 a falta de 50 segundos. Ray Allen, que había tenido bajos porcentajes de tiro durante el partido, pudo empatar el partido y llevarlo a una segunda prórroga pero no tuvo éxito.
Rose fue la estrella del partido anotando 36 puntos en su debut en los playoffs, dando la primera victoria a Chicago Bulls, muy importante al ser fuera de casa. Rose se convirtió en el segundo jugador rookie en conseguir más de 35-puntos y 10 asistencias, después de Chris Paul que lo consiguió en 2008; además era la mayor anotación por un Bull desde la retirada de Michael Jordan. Esta victoria marcó la primera victoria de los Bulls a los Celtics en toda su historia, después de la temporada regular.[1] Sin embargo, todos estos esfuerzos fueron en vano, ya que finalmente los Celtics se clasificarían después de siete partidos.
En el primer partido, los Magic tuvieron una ventaja de 18 puntos en el último cuarto pero Andre Iguodala anotaría a falta de 2.2 segundos para darle a los Sixers su primera victoria fuera de casa. Los Sixers también conseguirían una remontada en el segundo partido. Los Magic volvían a ganar por 18 puntos en el ecuador del tercer cuarto antes de que los Sixers consiguieran acercarse a cinco puntos, pero finalmente Magic mantendría la distancia ganando su primer partido en las series. Los Sixers ganaron el tercer partido cortesía de otro tiro en el último momento; Thaddeus Young con una bandeja a falta de 2 segundos aseguraba la victoria, a pesar del récord personal de Dwight Howard en playoff que consiguió 36 puntos. Los Magic ganarían el cuarto partido en los instantes finales; Hedo Türkoğlu anotó un triple para ganar el partido a falta de 1.1 segundos, empatando las series.
En el quinto partido, Dwight Howard además de anotar 24 puntos conseguiría un nuevo récord en playoffs capturando 24 rebotes, liderando a los Magic a la victoria. El siguiente partido se vería marcado por el incidente entre Howard y Samuel Dalembert, que resultaría con un partido de suspensión para Howard.[2] Rookie Courtney Lee también ser vería envuelto y sería suspendido. A pesar de perder a dos titulares, Howard y Lee, los Magic ganarían otro partido fuera de casa, venciendo a los Sixers por 25 puntos y pasando a la siguiente fase.
Los Hawks abrieron las series con una victoria por 26 puntos después de ir liderando el partido al menos por 20 puntos al descanso. Los Hawks además empataron un récord de franquicia del partido que menos puntos recibían en un playoff. Sin embargo, los Heat se repusieron a la derrota y vencieron en el segundo partido, fuera de casa, empatando las series. Los Heat también ganarían el tercer partido en casa, en cierto modo este partido tuvo similitudes al primero de las series, con una gran diferencia en el marcador. Los Heat ya ganaban por 19 puntos en el descanso llegando a 29 al final del partido. En el siguiente partido, los Hawks dieron la vuelta a la tortilla ganando el partido fuera de casa y empatando las series.
El quinto partido se vio marcado por faltas muy duras y técnicas. Dwyane Wade se vio envuelto en alguna jugada conflictiva con Solomon Jones. Los jugadores del quinteto: Wade, Jones, Jamaal Magloire y Josh Smith recibieron faltas técnicas en el incidente. Wade más tarde recibiría una falta flagrante después de golpear a Maurice Evans durante un intento de bandeja. Los Hawks finalmente ganarían el encuentro, a pesar de perder a su pívot titular, Al Horford, debido a una lesión en el segundo cuarto. Los Heat empatarían las series 3–3 después de ganar el sexto partido. Wade anotó 41 puntos liderando a los Heat a una victoria de 26 puntos, fuera de casa. En el séptimo y último partido los Hawks ganarían de 13 puntos de diferencia. Todos los partidos de esta serie se decidirían por al menos 10 puntos de diferencia y con una media de diferencias de 19 puntos.
Los Nuggets vencieron a los Hornets en el primer partido, liderados por el jugador de casa Chauncey Billups que anotó 36 puntos en su debut en playoffs con los Nuggets. Consiguió un récord en playoffs con 8 triples y 8 asistencias en este partido. Continuó con su racha en el segundo partido, anotando 31 puntos y llevando a Nuggets a una ventaja de 2–0 en las series. Los Hornets regresaron con una victoria en el tercer partido. Este partido se vio marcado por la gran cantidad de faltas que se pitaron, un total de 58, resultando en cuatro jugadores expulsados por límite de faltas, David West y Tyson Chandler en los Hornets, y Kenyon Martin y Nenê en los Nuggets. Los árbitros además también pitaron tres faltas flagrantes de James Posey, Chandler y Billups. El entrenador de los Hornets, Byron Scott también recibió una falta técnica después de discutir la falta de Posey.
Los Nuggets ganarían por una diferencia de 58 puntos en el cuarto partido. Diferencia de puntos que no ocurría en la historia de los playoffs de la NBA desde hacía 53 años por Minneapolis Lakers. Los Hornets acumularon muchos récords negativos en este partido como la más baja anotación y 26 pérdidas de balón. Los Nuggets de esta forma conseguían su primera victoria en las series desde 1994. Carmelo Anthony anotó su máxima anotación en un partido de playoffs con 34 puntos. La diferencia media de anotación para los Nuggets en esta serie fue de 37.5 puntos.