Pascual de Aragón

Pascual de Aragón-Córdoba-Cardona y Fernández de Córdoba


93. arzobispo de Toledo
Primado de España
Canciller mayor de Castilla
1 de febrero de 1666-28 de septiembre de 1677
Predecesor Baltasar Moscoso y Sandoval
Sucesor Luis Manuel Fernández Portocarrero
Información religiosa
Ordenación sacerdotal 1655 por Baltasar Moscoso y Sandoval
Ordenación episcopal 5 de abril de 1660 por Gabriel Adarzo de Santander
Proclamación cardenalicia 21 de noviembre de 1661 por Alejandro VII
Título cardenalicio Cardenal presbítero de Santa Balbina
Información personal
Nacimiento Mataró, 1626
Fallecimiento Madrid, 28 de septiembre de 1677
Alma máter universidad de Salamanca

Escudo de Pascual de Aragón-Córdoba-Cardona y Fernández de Córdoba

Pascual de Aragón-Córdoba-Cardona y Fernández de Córdoba (Mataró, 1626 - Madrid, 1677) fue cardenal y hombre de estado español, arzobispo de Toledo, virrey de Nápoles, inquisidor general de España y consejero de estado.

Biografía

Fue hijo de Enrique de Aragón (duque de Cardona y Segorbe, y virrey de Cataluña) y de su segunda esposa Catalina Fernández de Córdoba y Figueroa (hija de los marqueses de Priego). Estudió en el colegio de San Bartolomé de la universidad de Salamanca, donde se graduó en cánones.

En 1648 fue nombrado canónigo de la catedral de Toledo, y poco después arcediano de Talavera, capellán mayor de Toledo y catedrático en la universidad de Toledo; en 1652 promotor fiscal de la Inquisición y al año siguiente miembro del consejo de Aragón en la regencia de Cataluña.[1][2]

En 1655 fue ordenado sacerdote por el arzobispo Baltasar Moscoso y Sandoval y en abril de 1660 el papa Alejandro VII lo nombró cardenal presbítero de Santa Balbina,[3]​ con cuyo título fijó su residencia en Roma.[4]

En 1664 Felipe IV le encargó el virreinato del reino de Nápoles en sustitución de Gaspar de Bracamonte Guzmán; en sus funciones como virrey tuvo que hacer frente a la precaria situación de Nápoles, inmersa en la corrupción y el bandidaje.[5]​ A su regreso a España fue nombrado miembro del Consejo de Estado.[6]

Mariana de Austria, regente tras la muerte de Felipe IV, le nombró inquisidor general de España, aunque poco después le instó a renunciar sin haber llegado a ejercer efectivamente el puesto.[7]

En febrero de 1666 recibió el arzobispado de Toledo, cuya dignidad le confería el cargo de miembro del consejo de regencia constituido durante la minoría de edad de Carlos II. En abril del mismo año volvió a España dejando el gobierno de Nápoles a su hermano Pedro Antonio de Aragón.

A pesar de su condición cardenalicia, no participó en los cónclaves de 1667, 1669 y 1676.[2]​ Nombrado presidente del Consejo de Aragón en 1677, murió en Madrid ese mismo año dejando todos sus bienes al colegio de Nuestra Señora de los Infantes; su cuerpo fue enterrado en el convento de las capuchinas de Toledo, del cual había sido protector y benefactor.[1]


Predecesor:
Gaspar de Bracamonte Guzmán

Virrey de Nápoles

1664 - 1666
Sucesor:
Pedro Antonio de Aragón
Predecesor:
Diego de Arce y Reinoso

Inquisidor general de España

1665
Sucesor:
Juan Everardo Nithard
Predecesor:
Baltasar Moscoso y Sandoval

Arzobispo de Toledo
Primado de España

1666 - 1677
Sucesor:
Luis Manuel Fernández Portocarrero
Predecesor:
Melchor de Navarra y Rocafull

Presidente del Consejo de Aragón

1677
Sucesor:
Pedro Antonio de Aragón

Referencias

  1. a b Ángel Fernández Collado: Los informes de visita ad limina de los arzobispos de Toledo, pág. 54. Cuenca, 2002.
  2. a b Salvador Miranda: The Cardinals of the Holy Roman Church.
  3. David M. Cheney: Catholic-hierarchy.
  4. Para toda la estancia italiana de Pascual de Aragón, véase Diana Carrió Invernizzi, El gobierno de las imágenes Archivado el 24 de septiembre de 2011 en Wayback Machine.
  5. Eustaquio Fernández Navarrete: Virreyes de Nápoles, pág. 530, incluido en la "Colección de documentos inéditos para la historia de España", vol. XXIII.
  6. Francisco Xavier de Garma y Durán: Theatro universal de España: descripcion eclesiastica y secular de todos sus reynos y provincias, vol. IV, pág. 109. Barcelona, 1751.
  7. Juan Antonio Llorente: Historia crítica de la Inquisición de España, pág. 224. Madrid, 1822.