Operación Estrella AzulLa Operación Estrella Azul fue una operación militar llevada a cabo por las Fuerzas Armadas de la India entre el 1 y el 10 de junio de 1984 en la ciudad de Amritsar, Punjab. El objetivo principal de la operación era eliminar a los militantes sij que se habían ocultado en el complejo del Templo Dorado, conocido como Harmandir Sahib, uno de los lugares más sagrados para la comunidad sij. El Punjab, una región del norte de la India con una importante población sij, había sido testigo de un creciente descontento y agitación en la década de 1980. Los sijs demandaban una mayor autonomía y reconocimiento de su identidad cultural y religiosa. El líder espiritual Jarnail Singh Bhindranwale, quien dirigía la corriente fundamentalista Damdami Taksal, había buscado refugio dentro del Templo Dorado y utilizaba el santuario como base para sus actividades separatistas.[1] La entonces primera ministra de la India, Indira Gandhi, se enfrentó a la decisión de cómo manejar la creciente inestabilidad en Punjab y hacer frente a la amenaza de militantes armados dentro de un lugar sagrado para los sijs. Después de varios intentos de negociación fracasados, el gobierno indio optó por llevar a cabo la operación militar para desalojar a los militantes y restaurar el control sobre el Templo Dorado. Sin embargo, la decisión de llevar a cabo la Operación Estrella Azul resultó ser altamente controvertida. La intervención militar en un lugar sagrado provocó una fuerte reacción negativa de la comunidad sij y desencadenó protestas y disturbios en Punjab y otras partes del país. Muchos sijs vieron la operación como un ataque directo a su religión y una violación de su santuario más sagrado.[2] La operación se llevó a cabo con un asalto masivo al Templo Dorado, que resultó en un enfrentamiento prolongado y sangriento entre los militantes y las fuerzas de seguridad. Durante el enfrentamiento, se produjeron grandes daños en el complejo del templo y una cantidad significativa de víctimas alrededor de 426, tanto entre los militantes como entre los civiles que se encontraban dentro del lugar durante la masacre.[3][4]
Durante la operación, se desató una masiva ofensiva militar que incluyó el uso de tanques y artillería pesada contra los militantes y civiles que se habían atrincherado en el Templo Dorado. Las imágenes de la destrucción y la devastación dentro del complejo del templo conmocionaron al mundo, y la pérdida de vidas, tanto de militantes como de civiles, fue considerable. El trágico desenlace de la Operación no solo afectó la relación entre el gobierno indio y la comunidad sij, sino que también tuvo graves consecuencias políticas. El 31 de octubre de 1984, apenas unos meses después de la operación, Indira Gandhi fue asesinada por sus dos guardaespaldas sij en un acto de venganza, lo que desató violentos disturbios antisijs en Delhi y otras partes del país. Miles de sijs fueron asesinados en estos disturbios, marcando uno de los episodios más oscuros en la historia de la India moderna.[5][6] Referencias
|