Nefritis lúpica
Una nefritis lúpica (NL) es un tipo de enfermedad renal que se produce secundaria al lupus eritematoso sistémico (LES), una enfermedad autoinmune.[1] Los síntomas pueden incluir orina espumosa, edema en las piernas, fiebre y dolores musculares.[1] Cuando ocurre, generalmente es al menos 3 años después del inicio del LES.[2] Las complicaciones pueden incluir hipertensión e insuficiencia renal .[1] Entre los factores de riesgo se incluyen ciertos determinantes genéticos.[2] El mecanismo subyacente implica una reacción de hipersensibilidad de tipo III y la formación de complejos inmunitarios.[2] Estos complejos se acumulan cerca de la membrana basal glomerular del riñón y provocan inflamación.[2] El diagnóstico se puede sospechar con base en análisis de sangre y orina, y se confirma con una biopsia renal.[1] El tratamiento depende de la gravedad de la enfermedad.[2] Se pueden usar medicamentos para inhibir el sistema inmunitario, como prednisona, ciclofosfamida o hidroxicloroquina.[1] La presión arterial puede requerir control con medicamentos como los inhibidores de la ECA, diuréticos o bloqueadores beta.[1] Eventualmente se puede requerir diálisis.[2] Afecta hasta el 50% de los adultos y el 80% de los niños con lupus.[1] La edad de inicio típicamente es en adultos jóvenes.[2] Los hombres se ven más comúnmente afectados que las mujeres.[1] Si bien el lupus fue descrito por primera vez en el año 400 a. C. por Hipócrates, sus efectos sobre los riñones se documentaron por primera vez a principios del siglo XX.[2][4] Referencias
Enlaces externos
|