Especie de gente armada que desde el tiempo de Luis VIII hasta Carlos V de Francia habitaron en aquel reino. La mayor parte de sus individuos también llamados aventureros y tarde-venidos, eran soldados licenciados o gente que no estaba acostumbrada a trabajar, los cuales vivían del robo y cometiendo mil otras maldades en los pueblos y caminos. Esta clase de bandidos solían elegir por jefes a aquellas personas de distinción que por algún lance o aventura particular se hallaban proscritos o en desgracia con el soberano. Los malandrines se hicieron temibles por sus excesos en Francia. Después pasaron a Italia y últimamente Beltran de Guesclin logró libertar a su patria de una gente tan malvada conduciéndolos a España so pretexto de la guerra contra los moros.[2]
Término que el DRAE define como "maligno, perverso, bellaco", cuya etimología proviene de la palabra italianamalandrino, que en esa lengua significa "salteador".[3] En el uso actual queda un efecto en cierto modo anacrónico,[4] tal como puede asociarse a su frecuente aparición en la literatura clásica, particularmente en la obra de Cervantes:
... si pudiera subir o apearme, que yo te hiciera vengado, de manera que aquellos follones y malandrines se acordaran de la burla para siempre, aunque en ello supiera contravenir a las leyes de la caballería...
... los malandrines encantadores que la transformaron en labradora....
Y el prudentísimo Cide Hamete dijo a su pluma: «Aquí quedarás colgada desta espetera y deste hilo de alambre, ni sé si bien cortada o mal tajada péñola mía, adonde vivirás luengos siglos, si presuntuosos y malandrines historiadores no te descuelgan para profanarte.
Don Quijote, I Parte, cp. XVIII,[5] II Parte, cp. LXXIII,[6] II Parte, cp. LXXIIII[7]
↑Real Academia Española. «malandrín». Diccionario de la lengua española (23.ª edición).. A su vez, "bellaco" (que es también el nombre de una localidad), es definido como "malo, pícaro, ruin / astuto, sagaz" Real Academia Española. «bellaco». Diccionario de la lengua española (23.ª edición).