Hermenegildo García Verde
Hermenegildo García Verde (Buenos Aires, 27 de octubre de 1884-Sevilla, 18 de abril de 1965) fue un jugador de fútbol, artista y hacendado hispano-argentino.[1] BiografíaNació en el seno de una familia profundamente católica. Era hijo del indiano Hermenegildo García Sanz (1850-1929) y de Cándida Verde Delgado (1860-1932). Su padre, vinculado al Partido Integrista, fue uno de los favorecedores del diario El Siglo Futuro[2][nota 1] y destacó por sus obras de caridad, llegando a fundar tres colegios para pobres en la provincia de Soria.[4] El patriarca soriano, defensor de las tesis tradicionalistas, proporcionó a sus hijos una estricta educación cristiana[5] y solía hablarles con admiración del presidente ecuatoriano Gabriel García Moreno, héroe de la causa católica.[6] Siendo niño, Hermenegildo se trasladó con su familia desde Argentina hasta España, de dónde procedían sus padres. Residieron primero en Bilbao,[1] aunque pasaban todos los veranos y parte del otoño en Soria y en Derroñadas, el pueblo natal de su padre.[7] Hermenegildo García Verde fue pionero en algunas actividades deportivas y manifestaciones artísticas en la provincia de Soria.[1] Aficionado al fútbol, entre 1903 y 1910 formó parte del Athletic Club de Bilbao.[8] Al trasladarse con su familia a pasar los inviernos a Madrid, fue fundador, medio centro y capitán del Atlético de Madrid, equipo en el que destacó como uno de los mejores jugadores.[7] Una vez que la sucursal madrileña rompió su dependencia del club bilbaíno García llegó a ser su contador.[9] Además del fútbol, practicó otros deportes como la pelota mano,[7] el alpinismo o la natación, y, según José Tudela, fue el primer deportista que cruzó a nado la Laguna Negra de Urbión.[10] Dedicado también a la pintura, fue discípulo en Madrid de Eduardo Chicharro[11] y condiscípulo y amigo del mejicano Diego Rivera. También fue amigo de Gustavo de Maeztu[12] y colaboró con Joaquín Sorolla para que este pintara unos tipos sorianos.[13] En política era tradicionalista y en diciembre de 1910 se inscribió para concurrir a un banquete en homenaje a las minorías carlistas e integristas de las Cortes, organizado por el diario El Correo Español en Madrid.[14] Puesto que su familia mantenía aún negocios y haciendas en Argentina, en 1916 Hermenegildo García Verde regresó a Buenos Aires. Durante el viaje, conoció a José Ortega Munilla y José Ortega y Gasset, a quienes mostró lo más destacado de la colonia soriana en tierras del Plata y juntos visitaron la Patagonia. Hermenegildo y los Ortega desarrollarían una estrecha amistad, a pesar de sus diferencias ideológicas. A consecuencia de esta relación, Ortega Munilla publicaría después el libro de narraciones para niños Los tres sorianitos (1922).[15] En Derroñadas construyó una casa que recogió todos los elementos de construcción de la casa pinariega, y que, según G. Manrique de Lara, quedaría «como elevado ejemplo moral de conocimiento y sencillo museo en el que podrán inspirarse los arquitectos encargados de proyectar viviendas en la zona pinariega de Soria».[16] Fallecido en Sevilla en 1965, fue enterrado en el panteón familiar del cementerio de Soria.[1] Según Manuel Fal Conde, Hermenegildo García Verde fue «el auténtico trasunto de su padre, don Hermenegildo García Sanz, el patriarca y fundador de tantas obras óptimas».[17] Familia y vinculación con el carlismoTuvo por hermanos a Cándida, Carmen, Pilar, Tomasa, Celestino, José María, Mercedes, Manuel, Ricardo y Ramón García Verde.[18] Uno de ellos, José María García Verde, fue jefe de la Comunión Tradicionalista en Andalucía Occidental durante la Segunda República y perteneció después a la Junta Nacional Carlista de Guerra. Otro de ellos, Celestino, murió combatiendo en la guerra civil.[17] Su sobrina Mercedes de la Gándara García (hija de su hermana Cándida)[19] se casó con Juan Sáenz-Díez,[20] también destacado dirigente carlista durante la guerra civil, el franquismo y la Transición. Otro de sus sobrinos, José Luis Marín García-Verde (hijo de su hermana Tomasa),[21] fue combatiente requeté[22] y militar y estuvo implicado en los sucesos de Montejurra de 1976.[23] Hermenegildo García Verde se casó con Genara Llorente Labrué. Sus hijos Hermenegildo y José Ramón García Llorente se destacaron en el carlismo del último tercio del siglo XX.[24][25] El primero, veterano requeté,[nota 2] participó a principios de la década de 1970 en la reconstitución de la Comunión Tradicionalista,[26][27] y el segundo fue un estrecho colaborador de Sixto Enrique de Borbón en las décadas de 1980 y 1990.[28][nota 3] Uno de sus nietos, José Ramón García Gallardo, es presbítero de la Hermandad Sacerdotal San Pío X y consiliario nacional de las Juventudes Tradicionalistas.[32] Notas
Referencias
Bibliografía
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