Luego del subcampeonato mundial obtenido en 2006, en la fase final quedó encuadrada en el grupo C, en el denominado grupo de la muerte, junto con los Países Bajos, Italia y Rumania. En su debut en el Letzigrund Arena (Suiza), tuvo un decepcionante partido al no pasar del empate sin goles ante la selección rumana.[2] En su segundo encuentro disputado en el Stade de Suisse (Suiza), fue barrida 4-1 por los Países Bajos (fue la mayor derrota de Francia en competición oficial desde 1968), Dirk Kuyt en el minuto 9', Robin van Persie en el 59', abrieron el marcador para los Países Bajos, Thierry Henry descontó en el 71' para el equipo galo, pero al instante, luego de una espectacular combinación del ataque neerlandés anotó Arjen Robben con un ajustado disparo en el 72' y Wesley Sneijder en el 90'+2 tras gran tanto desde fuera del área, certificó la goleada.[3] En el último encuentro se volvió a disputar en el Letzigrund Arena, franceses e italianos reeditaban la final del último mundial, con ambos obligados a ganar para seguir con vida. Francia se quedó con un hombre menos al cometer Éric Abidal un penalti que Andrea Pirlo aprovechó para adelantar a los suyos en el minuto 25' y Daniele De Rossi en el 62', luego de marcar un gol de tiro libre sentenciaba el partido por 2-0, que dejó a Francia eliminada en primera ronda de grupos por primera vez desde 1992.[4]
Durante el torneo, las elecciones del entrenador Raymond Domenech fueron muy disputadas. La defensa, habitualmente el punto fuerte del equipo, se mostró franqueable (encajó seis goles) mientras que el ataque careció de realismo (sólo un gol anotado).
En esta eurocopa marca el final de una era. Poco después de la derrota ante Italia, Lilian Thuram (poseedor del récord de más internacionalidades en la selección francesa) y Claude Makélélé, anunciaron su retiro internacional.