Abu Laila es un juez que al no ser renovado en su mandato por el gobierno debe trabajar conduciendo un taxi. El día que su hija Laila cumple siete años su esposa le encomienda que compre una torta y un regalo y vuelva temprano a casa, pero la vida cotidiana en Palestina no es simple.
Reparto
Intervinieron en la película los siguientes intérpretes:
El sitio Universo Cinema opinó en su crónica sobre esta película:
”… pequeña, estimable y bienintencionada película palestina que nos muestra una realidad más cotidiana y cercana que la que habitualmente nos llega del país a través de los noticiarios diarios, pero la propuesta también es demasiado inofensiva e ingenua para conseguir unos resultados mejores…. aquí le falta garra y echar el resto en los aspectos apuntados, ya fuera en la parte de denuncia, en la cómica, en la de retrato social, en el drama o en cualquier otra, el problema es que se queda a medio camino de todas ellas y aunque el producto final se ve con interés y ternura, te deja un sabor de insatisfacción por la oportunidad perdida.[2]
La crónica de El Correo de Vizcaya dijo:
”Atrapa al espectador esta inusual película …La acción transcurre casi íntegramente en los territorios ocupados de Ramalla...en medio de la violencia armada y el caos generalizado. Al tiempo, la corrupción y la burocracia administrativa, el 'vuelva usted mañana', funcionan a pleno pulmón en las altas instancias oficiales, mientras que los enfrentamientos entre Fatah y Hamas marcan a fuego las secuencias de la película…Pero…hay matices y resquicios de luz -nunca gratuitos- que rebajan el horror de un país martirizado. Desde las primeras imágenes, todo tiene carácter cotidiano y humano, que utiliza el claroscuro, en vez del negro absoluto, para comunicarnos esta respetable experiencia cinematográfica. Todo lo modesta y limitada que se quiera, pero también valiosa, por lo que tiene de amplitud de miras.[3]