Cryptococcus gattii
Cryptococcus gattii es una levadura encapsulada que se encuentra principalmente en climas tropicales y subtropicales. Su teleomorfo es Filobasidiella bacillispora, un hongo filamentoso que pertenece a la clase Tremellomycetes. Cryptococcus gattii causa, en seres humanos, una enfermedad pulmonar, la criptococosis (infección pulmonar), meningitis basal, y cryptococcomas cerebral. Ocasionalmente, el hongo está asociado con infecciones de la piel, tejidos blandos, nódulos linfáticos, huesos, y articulaciones. En años recientes, ha aparecido en Columbia Británica, Canadá.[1] Desde 1999 hasta comienzos de 2008, doscientas dieciséis personas se han infectado en Columbia Británica con C. Gatti, y ocho murieron de complicaciones derivadas de esto.[2] El hongo además infecta animales como perros, koalas y delfines.[3] En 2007, el hongo apareció por primera vez en los Estados Unidos, en el Condado de Whatcom, Washington[4] y en abril de 2010 ha pasado a Oregón.[5] La cepa más recientemente identificada, designada VGIIc, es particularmente virulenta, habiendo causado la muerte de 5 de 21 casos humanos identificados.[6] [7] NomenclaturaC. gattii previamente ha tendido diferentes nombres incluyendo
ResumenLa enfermedad Cryptocóccica es muy rara y puede afectar los pulmones (pneumonia) y sistema nervioso (causando meningitis y lesiones cerebrales focales llamadas criptococcomas) en humanos. La principal complicación de la infección pulmonar es la insuficiencia respiratoria . La infección del sistema nervioso central puede conducir a hidrocefalia, convulsiones y déficit neurológico focal. EpidemiologíaLas más altas incidencias de infecciones por C. gattii se dan en Papua Nueva Guinea y Australia septentrional. Se han reportado también casos en India, Brasil, la isla de Vancouver, Canadá, estado de Washington, y Oregón. A diferencia de Cryptococcus neoformans, C. gattii no está asociado particularmente con el virus de inmunodeficiencia adquirida u otras formas de inmunosupresión. El hongo puede causar la enfermedad en personas sanas. TransmisiónLa infección se produce al inhalar esporas. El hongo no se trasmite de persona a persona o desde animal a persona. Una persona con enfermedad criptocóccica no es contagiosa. SíntomasLa mayoría de las personas expuestas al hongo no llegan a enfermarse. En aquellos que se enferman, los síntomas pueden llegar a aparecer muchas semanas o meses después de la exposición . Los síntomas son:
DiagnósticoCultivo de esputo, lavado broncoalveolar, biopsia de pulmón, fluido cerebrospinal o biopsia de cerebro, los especímenes en agar selectivo permite diferenciaión entre C. gattii y C. neoformans. Se pueden usar técnicas moleculares especializadas para Cryptococcus de especímenes que fallan en cultivo. La prueba de antígeno de Suero y CSF criptocócccica es una prueba preliminar útil para la infección criptococcica, y tiene una alta sensibilidad para detectar la enfermedad. No distingue entre diferentes especies de Cryptococcus. TratamientoEl tratamiento médico consiste de prolongada terapia intravenosa (durante 6–8 semanas o más) con una droga antifúngica Anfotericina B, o en su formulación convencional o lipídica. La adición de terapia intravenosa u oral de flucitosina mejora la tasa de respuesta. Fluconazol oral se administra entonces por seis a ocho meses o más. Los antifúngicos solos son, a menudo, insuficientes para la cura de las infecciones por C. gattii , y la cirugía para resecar pulmones infectados (lobectomía) o cerebro es a menudo requerido. shunts ventriculares y depósitos de Ommaya se emplean algunas veces en el tratamiento de las infecciones del sistema nervioso central. Véase también
Referencias
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