Comisión Chilena de Derechos Humanos
La Comisión Chilena de Derechos Humanos es un organismo no gubernamental cuyo objetivo es la defensa, promoción y difusión de los derechos humanos en Chile, además de la documentación de las violaciones a los derechos fundamentales cometidas durante la dictadura en ese país. Es reconocida por su antigua sede, ubicada en la ex Clínica Santa Lucía en Santiago, centro de detención y tortura durante la dictadura. HistoriaFundación y trabajo en dictaduraLa Comisión Chilena de Derechos Humanos fue fundada el 10 de diciembre de 1978 con el objetivo de «[trabajar] en forma pluralista, libre y autónoma, por la vigencia efectiva, respeto, protección y promoción de los derechos económicos, sociales, culturales, civiles y políticos consagrados en la carta internacional de derechos humanos, en los tratados, resoluciones y acuerdos complementarios de Naciones Unidas y demás organismos internacionales en los cuales Chile es miembro».[1] Concurrieron a la fundación de este organismo el sindicalista Clotario Blest, el abogado Máximo Pacheco, la escritora Mila Oyarzún y el abogado Jaime Castillo Velasco. El abogado Castillo lideró la Comisión desde 1987 hasta el año 2003. Desde el comienzo de su trabajo, la Comisión Chilena de Derechos Humanos fue recopilando antecedentes orientados a la defensa de los perseguidos por la dictadura, participando en su defensa legal, tanto a nivel nacional como a través de organismos internacionales. Además, la Comisión trabajó en tareas de educación, promoción y estudio del tema de los derechos humanos.[2] Durante años la Comisión y sus profesionales se encargaron de documentar tanto las denuncias de violaciones a los derechos humanos como la situación política social durante la dictadura. Además, elaboraban Informes Mensuales en que analizaban la situación del país o cuestiones jurídicas, los cuales posteriormente fueron digitalizados y puestos a disposición del público en la página web de la institución. Vuelta a la democraciaAl término de la dictadura, la estructura del organismo cambió a un nuevo ordenamiento basado en cinco Programas de Trabajo. A partir del año 2000 y sobre todo después del 2003, fecha en que fallece Jaime Castillo Velasco, las actividades de la Comisión Chilena de Derechos Humanos se enfocaron principalmente a la atención del público que consultaba el Archivo de Memoria. Este Archivo ha tenido un importante rol como fuente de información y para restaurar la dignidad de los perseguidos y presos políticos, apoyar sus reivindicaciones y mantener la vigencia de los derechos humanos en Chile. En diciembre de 2019 la institución denunció un robo de computadoras desde su sede, las cuales contenían «información sensible en materia de derechos humanos», incluyendo testimonios de víctimas de violaciones de derechos humanos recopiladas durante las protestas ocurridas en Chile desde octubre de ese año.[3] ActualidadDesde el año 2024, la estructura de la Comisión cuenta con una serie de equipos encargados de diversas temáticas, tanto jurídicas como sociales. En su conjunto, estos grupos se encargan de realizar diversas actividades de promoción, difusión y defensa de los derechos humanos, como por ejemplo, charlas y talleres para vecinos de comunas vulnerables, escuelas permanentes de derecho en poblaciones, presentación de informes para organismos nacionales e internacionales, entre otras. Directiva y equipos de trabajoActualmente, la directiva de la Comisión está conformada por[4]:
Además de la directiva, la Comisión cuenta con diversos equipos encargados de asuntos específicos:
Archivo de MemoriaEl 4 de septiembre de 2024, el Consejo de Monumentos Nacionales (CMN) acordó aprobar por unanimidad de sus consejeros la solicitud de declaratoria como Monumento Nacional de cinco archivos que albergan documentos y archivos referidos a los derechos humanos.[5] Entre los cincos archivos declarados como monumento nacional se encuentra el Archivo de Memoria alojado en el Centro de Documentación de la Comisión Chilena de Derechos Humanos. SedeEl inmueble que aloja actualmente a la comisión está ubicado en calle Miraflores. La antigua sede de la Comisión, ubicada en calle Santa Lucía 162, Santiago, fue sede del Movimiento de Acción Popular Unitaria (MAPU) desde 1972. En 1974 pasó a ser una clínica clandestina de la Dirección de Inteligencia Nacional (DINA), conocida como Clínica Santa Lucía. Tras la recuperación de la democracia, el inmueble funcionó como sede de la Comisión Chilena de Derechos Humanos, aunque recientemente se encuentra destinado como espacio para la reparación y la memoria.[6] Producción bibliográfica y literariaA lo largo de su historia, la Comisión ha escrito, producido y/o editado diversos contenidos bibliográficos y literarios, como por ejemplo:
Referencias
Enlaces externos
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