La columbita o columbita-(Fe), su correcto nombre mineralógico,[2] es un mineral de composiciónFe2+Nb2O6 incluido en el grupo IV (óxidos) según la clasificación de Strunz.
Otros nombres de este mineral son niobita y ferrocolumbita.
Historia
El nombre de columbita fue asignado por el químico inglés Charles Hatchett (1765-1847) en 1801, a partir de un ejemplar recogido a mediados del siglo XVII en un lugar llamado Nautneague (considerado el actual Haddam, Connecticut, Estados Unidos). Dicho ejemplar formaba parte de la colección de minerales de John Winthrop (1606-1676) y, junto a otras 600 muestras, fue donado por su homónimo y nieto, John Winthrop (1681-1747) a Hans Sloane, presidente de la Royal Society de Gran Bretaña, al pasar a ser miembro de la citada sociedad en 1737.[3]
En este espécimen Hatchett identificó un nuevo elemento,[4] al que llamó columbio (hoy llamado niobio) en honor de Cristóbal Colón, descubridor de América.[5]
El nombre del mineral conservó la raíz columb- del antiguo nombre del elemento; por su parte, el sufijo -(Fe) indica el predominio del hierro frente al manganeso en esta especie mineral.[6]
Propiedades
La columbita-(Fe) es un mineral opaco (translúcido en extremos finos), de color negro o negro parduzco y lustre submetálico. Con luz transmitida tiene color pardo rojizo y con luz reflejada su color es blanco grisáceo con un tinte parduzco y reflexiones rojizas internas.[7]
Es frágil, tiene dureza 6 en la escala de Mohs y densidad entre 5,2 y 6,65 g/cm³. Es un mineral paramagnético[6][7] escasamente soluble en ácidos.[8]
Cristaliza en el sistema ortorrómbico, clase dipiramidal.
Su contenido en Nb2O5 llega hasta el 78% mientras que el de FeO puede alcanzar el 21%;[9] sus impurezas más habituales son manganeso y tántalo.[7]
La columbita-(Fe) forma dos series mineralógicas, una con la tantalita-(Fe) y otra con la columbita-(Mn); ambas series conforman el grupo mineralógico de la columbita.[10] En la mayoría de los casos contiene también pequeñas cantidades de uranio o torio substituyendo al hierro, lo que hace que en estos casos sea ligeramente radiactiva.[11]
Morfología y formación
La columbita-(Fe) forma cristales cortos prismáticos o ecuantes (con todas las dimensiones iguales), también planos y tabulares de hasta 0,75 m de longitud. A menudo se presenta en grupos de cristales paralelos de gran tamaño. En otras ocasiones tiene hábito masivo.
↑Winthrop, John (1844). «Art. V. Selections from an Ancient Catalogue of objects of Natural History, formed in New England more than one hundred years ago». En Silliman, Benjamin, ed. The Amer. J. Science and Arts 47. New Haven: Baldwin, Cradock, and Joy. p. 282. Consultado el 12 de febrero de 2015. «... (p.282:) Mr. Winthrop was grandson of the first governor of Connecticut, great grandson of the first governor of Massachusetts ... (p.290:) A black mineral ... Is this the Columbite? ... it appeared that it had been sent ... to Sir Hans Sloane, by Mr. Winthrop of Massachusetts. ...'».
↑Griffith, William P.; Morris, Peter J.T. (22 de septiembre de 2003). «Charles Hatchett FRS (1765–1847), Chemist and Discoverer of Niobium». The Annals of Philosophy. New Series. July to December 1824. London: The Royal Society Publishing. p. 359. Consultado el 12 de febrero de 2015. «... In 1800–01, while he was arranging some minerals at the British Museum in Bloomsbury, he became particularly interested in a specimen which was described in Sir Hans Sloane’s catalogue of the ‘Metalls’, no. 2029 from his collection, as ‘a very heavy black stone with golden streaks ... from Nautneague. From Mr. Winthrop’ ... The donor was probably John Winthrop (1681–1747), a great-grandson of the founder of Massachusetts Bay colony. When Winthrop was elected FRS in 1734 he gave Sir Hans Sloane, then President of the Society, a collection of about 600 minerals. ...'».
↑Jameson, Robert (1805). System of Mineralogy, Vol. II.. Edinburgh: Bell and Bradfute (et al.). p. 582. Consultado el 15 de febrero de 2015. «... Mr Hatchett found it to contain a metal, which, from its properties, could not be referred to any hitherto known; hence he was of opinion that it should be considered as a new genus, to which he gave the name Columbium, in honour of the discoverer of America. ...'».
↑Calvo Rebollar, Miguel (2009). Minerales y Minas de España. Vol. IV. Óxidos e hidróxidos. Madrid: Escuela Técnica Superior de Ingenieros de Minas de Madrid. Fundación Gómez Pardo. p. 478.