En iconografía suele representarse con la imagen de una mujer harapienta que lleva en sus manos un ave que se alimenta de basura y carroña, o bien un conejo (o liebre), como símbolo de los animales asustadizos.[2]
Bibliografía
Revilla, Federico (1990). Diccionario de Iconografía. Madrid: Ediciones Cátedra. ISBN84-376-0929-1.