Arte mediterráneo o estilo mediterráneo son denominaciones historiográficas ambiguas, pero utilizadas en la bibliografía,[1] que se refieren a muy distintos estilos artísticos asociados a "lo mediterráneo" (cultura mediterránea, civilización mediterránea) con distintos criterios geográficos o conceptuales. Muy a menudo se identifica estéticamente con el arte clásico, aunque también hay ejemplos de lo contrario en la determinación de qué sea la estética mediterránea.
En 1914 Ortega publica las «Meditaciones del Quijote»... la fusión del sensualismo, mediterranismo o impresionismo de los españoles, con el idealismo, racionalismo, conceptualismo, etc., de los... alemanes... la tesis de la que partía en «Del realismo en pintura»: el arte mediterráneo, frente al idealismo clásico, es en su mayoría impresionista, sensual, "superficial" en el buen sentido, pero no lo confundamos con el "realismo". Nos interesan las impresiones fugaces, la apariencia de las cosas, las superficies... vivir con los ojos pertenecería al artista mediterráneo, no al ilustrado Goethe... "puesto en confrontación con nuestros artistas del Sur ese ver goethiano es más bien un pensar con los ojos". Esta es la fusión que, en el fondo, quiere Ortega: el pensar germánico con el ver mediterráneo.... "lo que en el ver pertenece a la pura impresión es incomparablemente más enérgico en el mediterráneo. Por eso suele contentarse con ello: el placer de la visión, de recorrer, de palpar con la pupila la piel de las cosas es el carácter diferencial de nuestro arte. No se le llame realismo porque no consiste en la acentuación de la res, de las cosas, sino de la apariencia de las cosas. Mejor fuera denominado aparentismo, ilusionismo, impresionismo".
La idea de arquitectura mediterránea empieza a emplearse en el período de entreguerras... Es en aquel clima de profundos trastornos del mundo occidental cuando, desde diferentes sectores, aparece el deseo de identificar y de perfilar algo que se llamará arquitectura mediterránea.
Si repasamos cualquier libro de historia del arte y de la arquitectura, veremos que en realidad habitualmente hablan de arquitectura griega, arquitectura helenística, arquitectura romana, arquitectura visigótica, del renacimiento, del barroco, pero no suele haber ningún capítulo que se titule arquitectura mediterránea. Por consiguiente, no es una noción que haya existido siempre, ni es el resultado de alguna exigencia permanente. Es probable que muchos de los elementos que en la actualidad más fácilmente identificamos con la mediterraneidad hayan sido nombrados en otras épocas con otros nombres: se ha llamado arquitectura clásica, tradición clasicista, tradición vernácula o tradición de los pueblos del Mediterráneo, etc. Y no es sino cuando aparece cierta necesidad de identificarse específicamente, cuando se empieza a hablar de unos rasgos característicos del Mediterráneo.
Mientras que la historia tradicional es una historia lineal, cronológica, en realidad, en el pensamiento occidental, probablemente a raíz de la crisis de finales del siglo XIX, la que produce la filosofía de Nietzsche, se produce una manera de pensar diferente, que ya no es cronológica, sino bipolarizada: es cuando se empieza a hablar de clasicismo y romanticismo, de cultura del Norte y cultura del Sur, de dionisíaco y apolíneo, de mercantil y capitalista, de protestante y de católico. Incluso de la cultura del vino y de la cultura de la cerveza... del derecho romano y del derecho germánico... situaciones polarizadas, cada una de las cuales representa un sistema completo de arquetipos, de formas de pensar diferentes.
Es... en esta manera de ver el pasado, no como una cosa detrás de la otra, sino como la constanteconfrontación entre actitudes, tradiciones, formas culturales, inclusive raciales, de pensar las cosas de manera diversa, donde aparece la polaridad de lo que es mediterráneo, con lo que es del norte de Europa, con lo que es germánico.... Chueca Goitia... escribió a finales de los años cuarenta... Invariantes castizos de la arquitectura española... el intento de encontrar... una especie de rasgos comunes que sirvieran para establecer sus constantes... algo parecido es lo que se ha producido modernamente cuando, desde muchos lugares distintos, se ha empezado a preguntar qué sería lo específico de una arquitectura mediterránea... el deseo de identificar unos rasgos propios de una arquitectura o de una tradición mediterránea nace, sobre todo, como antídoto, como corrección... como reacción frente a la arquitectura que llamamos del movimiento moderno.[3]
Mercadal... Sobre el Mediterráneo... la vocación mediterránea de otros creadores europeos de su tiempo ["gente del 27"], como Valéry, Cocteau, Camus, Le corbusier y Josep Lluís Sert.... su interés por la arquitectura popular mediterránea se sedimentó en el viaje del 1923, de camino a su pensionado en la Academia de Bellas Artes de Roma... "la arquitectura que se hacía y enseñaba a partir del final de la Primera Guerra Mundial ["cubista"], se parecía a estas construcciones populares".... En Arquitectura mediterránea (1927)... enuncia la semejanza de objetivos entre los postulados modernos y lo que se consideran tradicionalmente peculiaridades de la arquitectura mediterránea: "La horizontalidad predominante, la simplicidad de las formas -nacidas de su estructura-, la ausencia absoluta de decoración y una ligera intervención del color".[4]
Megalitismo, difundido particularmente por las islas del Mediterráneo (cultura talayótica en Baleares), aunque se prolonga desde el Estrecho de Gribraltar hasta Bretaña e Inglaterra.
Arte medieval calificado como "mediterráneo" (paradójicamente, no es usual hacerlo así con el más "mediterráneo" de todos: el arte bizantino, y tampoco con el arte islámico, muy presente en la ribera sur del mar, o con los artes sincréticos cristiano-musulmanes, como el mozárabe, el mudéjar y el árabe-normando)
A nuestros pintores mediterráneos (un Sala, un Pinazo y, sobre todo, un Sorolla) los reputamos consiguientemente como pintores de luz, pintores coloristas. Las cosas, sin embargo, son de otro modo. España no es un país de color.
↑Sergio Donadoni, El arte egípcio, 2002, pg 457 : Esta relación de intimidad entre el artista y el espectador apareció en Egipto en época amarniana y se manifestó, bajo distintos aspectos, en las mejores obras del Imperio Medio.... se reconoce la tradición autóctona por oposición al encanto elegante que resulta más fácil de imitar y que se adapta mejor a la exportación de unos módulos comprensibles incluso para alguien que es ajeno a la tradición figurativa egipcia. Si la nueva escultura mediterránea del Egipto libio refleja un arte más legible e internacional, en el Egipto de los faraones y de los dignatarios nubios, estas mismas cualidades despiertan una impresión similar a la que provocaban, en tiempos de Piankhi, las costumbres de sus rivales libios, que ignoraban las antiguas reglas de la pureza ritual.
↑Pierre Francastel contrapuso al primer románico mediterráneo de Puig la idea de un primer románico de tradición carolingia (L'Humanisme roman, RODEZ, 1942, citado en Francisco López Estrada, La Cultura del románico, siglos XI al XIII: letras, religiosidad, pg. 366). Se refiere a Josep Puig i Cadafalch [que] publicó en 1930 "La geografia i orígens del primer art romànic". En este libro define el arte románico del siglo XI como el románico de influencia lombarda que se extiende por Europa a partir de unos orígenes arquitectónicos en la zona del Adriático y desde el siglo V. Esta arquitectura tiene como base estructural el arte romano provincial al que se añade una decoración de arcuaciones ciegas y hornacinas, de origen oriental, transmitido a Occidente a través de Bizancio (Eduard Carbonell i Esteller, La problemática del primer románico en Artehistoria).
...el abad Oliba, al levantar nuevos edificios hacia el Este y el Oeste, aplicó toda la gama de progresos técnicos divulgados por el primer arte románico mediterráneo (Raymond Oursel, La arquitectura románica, pg. 240)
↑El Renacimiento Mediterráneo, exposición: Madrid-Valencia, Museo Thyssen-Bornemisza y Generalitat Valenciana. El Renacimiento Mediterráneo. Viajes de artistas e itinerarios de obras entre Italia, Francia y España en el siglo XV, Madrid, Fundación Colección Thyssen-Bomemisza, 2001