Annie Lacroix-Riz
Annie Lacroix-Riz (Francia, 18 de octubre de 1947) es una historiadora y activista política francesa. Profesora emérita de Historia Contemporánea en la Universidad de París VII - Denis Diderot. Es conocida por sus polémicos trabajos, tanto sobre la Segunda Guerra Mundial como sobre el régimen estalinista en la URSS. Sus publicaciones han dado lugar a diversas controversias a nivel internacional entre historiadores del mundo contemporáneo, especialmente, por su apoyo a la teoría conspiracionista de la Sinarquía[1] y por sus afirmaciones acerca del papel de las élites políticas y económicas francesas durante la ocupación de Francia por la Alemania Nazi. Además de su labor como historiadora, es conocida por su activismo político como integrante del Polo de Renacimiento Comunista en Francia. BiografíaAnnie Lacroix-Riz estudió Historia en la Universidad de París I. En 1970, se convirtió en Profesora Asociada de Historia en las universidades de París I y París VII.[2] En 1981 se doctoró en Literatura bajo la dirección del historiador Jean Bouvier. En su tesis doctoral, estudió la historia del sindicato francés Confédération Générale du Travail de 1944 a 1947. Su trabajo doctoral ha sido considerado como un análisis exhaustivo de las luchas obreras sindicales francesas.[3] Fue profesora de Historia Contemporánea en la Universidad de Toulouse II-Le Mirail, y posteriormente, en la Universidad de París VII. Es profesora emérita de la Universidad de París VII. A nivel de divulgación, realizó colaboraciones con Le Monde diplomatique y ha participado en la elaboración de documentales[4] con la Red Voltaire. Temas de investigaciónSus investigaciones se han centrado en la Historia Contemporánea Europea, desde la Segunda Guerra Mundial hasta la Guerra Fría. A raíz de sus investigaciones, se han generado cuatro grandes polémicas. La primera de ellas en relación con el papel que jugaron las élites económicas francesas en la invasión de Francia por la Alemania Nazi en 1940, a quienes Lacroix-Riz acusa de haber colaborado con los alemanes[5]. La segunda polémica deriva de los estudios de Lacroix-Riz que sostienen que parte del gas Zyklon B, usado en las cámaras de gas de los campos de concentración nazi, era producido en Francia[6]. La tercera de las polémicas suscitada por sus trabajos gira entorno al genocidio ucraniano por hambruna conocido como Holodomor, el cual Lacroix-Riz niega y considera como una gran carestía que obligó al poder soviético a imponer un estricto racionamiento de los alimentos, no habiendo sido, según las investigaciones y afirmaciones de esta autora, un genocidio intencionado[7]. Finalmente, también se han criticado varios de sus trabajos por defender la teoría sinarquista, que es considerada como una teoría conspiracionista que sostiene la existencia de grupos secretos organizados para controlar el Estado[8]. El Colaboracionismo con los nazisEn 1983 publicó diversos estudios sobre la colaboración económica de las élites de industriales y banqueros franceses con los nazis, bajo la Ocupación de Francia durante el régimen de Vichy.[9][10][11] Estos trabajos de Lacroix-Riz suscitaron polémica pues sostienen que las élites francesas provocaron deliberadamente la derrota y ocupación de Francia en 1940, para obtener beneficios económicos.[5] Pese a las controversias generadas, diversos historiadores también han resaltado la profundidad de los estudios de Lacroix-Riz, por ejemplo, el historiador Hubert Bonin, profesor emérito de historia económica contemporánea, sobre el trabajo de Lacroix-Riz señaló que es "una imagen en profundidad de los círculos de empresarios (...) implicados en la colaboración económica". La polémica sobre el industrial Louis RenaultEn abril de 2011, la sociedad de producción audiovisual Les Films de l'An 2 realizó un documental titulado Annie LacroixRiz avec ‘les amis de l'Huma’ de Bagneux (92)[12] donde se analiza la derrota de Francia frente a los nazis en 1940, se hacen análisis acerca de los posibles responsables de esta, del papel que jugó el Vaticano y de la colaboración de las élites francesas. Más adelante, participó en otra producción de Les Films de l'An 2, titulada Réhabilitation de Louis Renault: la riposte s'organise[13] para oponerse a los intentos de los herederos del industrial Louis Renault de rehabilitar su memoria de la acusación de haber sido uno de los empresarios que participó en la colaboración económica que permitió la victoria nazi en Francia.[14] Frente a las acusaciones de Annie Lacroix-Riz, el doctor en historia Laurent Dingli –que también es el marido de la nieta de Louis Renault y el autor de una biografía dedicada al industrial[15] – reaccionó afirmando que "Esta historiadora militante prefiere (...) basarse en informaciones incompletas o dudosas en lugar de contrastar las fuentes con los informes periciales solicitados por el Tribunal del Sena en la Liberación, informes que, por supuesto, deben ser sometidos a un examen crítico como cualquier otro documento histórico".[16] En este sentido, Dingli acusa a Lacroix-Riz de usar solo las fuentes que avalan sus hipótesis; ante estas acusaciones, Annie Lacroix-Riz replicó reproduciendo en su página web documentos de archivo que, según ella, atestiguan "el alcance de la colaboración de Louis Renault con Alemania".[17] La controversia sobre la producción francesa de Zyklon BEn 1996 Lacroix-Riz publicó un artículo en L'Humanité que volvió a despertar polémica entre sus colegas y que incluso llegó a tener repercusión en la prensa internacional[18][19][20]. En esta ocasión, su estudio afirmaba que en Francia se había producido gas Zyklon B, el gas empleado en las cámaras de gas e los campos de concentración nazis. Basándose en archivos alemanes, británicos y estadounidenses, la autora señalaba que el grupo francés Ugine había producido, en su filial Durferrit-Sofumi, gas Zyklon B[19][21][22]. Entre las pruebas mostradas por la historiadora que sostienen sus hipótesis está el hecho de que en dicha filial trabajaban técnicos alemanes y que durante la guerra se produjo un aumento desproporcionado"de la producción de Zyklon B que, no podía explicarse por la demanda del insecticida[23]. Más adelante, en un artículo publicado en 1997[24], Annie Lacroix-Riz señalaba que el Zyklon B producido en Francia estaba enteramente destinado a Alemania y con fines exclusivamente militares[25]. Sin embargo, reconoce que "todavía no tenemos ningún documento que demuestre formalmente que el Zyklon fabricado en la región de Oise estaba destinado a los campos de concentración"[26]. Retoma esta tesis en su libro Industriels et banquiers sous l'Occupation (1999), calificado por Jon Henley, periodista del diario británico The Guardian, como "extremadamente bien documentado"[27] y por el historiador Kenneth Moure, de la Universidad de California en Santa Bárbara, como "agresivamente marxista"[28]. Robert Paxton crítica a Annie Lacroix-Riz por basarse principalmente en los archivos de la Delegación Francesa en la Comisión del Armisticio (CA) en Wiesbaden[29]. Según el autor, "sólo la empresa matriz Degesch vendió 50 toneladas de cianuro de sodio directamente a los alemanes entre 1940 y 1944, lo que correspondería al 1,9% de la producción total"[30]. Según este autor, "según todos los indicios concordantes [...] la preocupación de los alemanes es únicamente desarrollar la estructura de comercialización y aplicación de antiparasitarios gaseosos en Francia" para realizar "las numerosas fumigaciones ordenadas por las tropas de ocupación", estando la actividad de la filial conjunta con Ugine "expresamente limitada a Francia, las colonias francesas y los países del protectorado y submandato [...] En un momento en el que sus capacidades nacionales de producción eran todavía excedentarias, la motivación de los alemanes era, evidentemente, no hacer entrar a Ugine en su propio mercado"[31]. Annie Lacroix-Riz señala, sin embargo, que las etiquetas del Zyklon B producido en la planta de Ugine en Villers-Saint-Sépulcre "estaban en alemán".[32] La controversia del HolodomorEn una "presentación crítica de documentos originales"[33] sobre el "exterminio por hambre" en Ucrania en 1933 (Holodomor en ucraniano), distribuida a sus alumnos en 2004[34], Lacroix-Riz impugna la presentación de esta hambruna como resultado de una intención "genocida" del poder soviético, prefiriendo verla como "una grave carestía que condujo a un estricto refuerzo del racionamiento"[34][35] que "fue resultado de fenómenos naturales y sociopolíticos"[36]. Se apoya, en particular, en los análisis de Wheatcroft y Davies[37], que, según Mark Tauger, "refutan decisivamente las explicaciones intencionalistas"[38]. Denuncia una "operación de propaganda", "un engaño"[39][40]. Ella adopta el análisis de Douglas Tottle, que afirma que el Holodomor es una creación "fraudulenta" de los "propagandistas nazis"[41], y cuyo trabajo considera "esencial"[39][42]. Sus artículos sobre este tema fueron el centro de una considerable controversia. Su texto original provocó en 2006 fuertes reacciones de las asociaciones de la diáspora ucraniana, entre ellas el Congreso Mundial Ucraniano[43]. A raíz de estos comentarios, una asociación de ucranianos organizó una petición que puede interpretarse como una solicitud de su suspensión como profesor universitario. A esto le siguió una contrapetición, cuyos primeros firmantes fueron principalmente los llamados comunistas ortodoxos. En una entrevista de septiembre de 2007[44] con Daniel Laurent sobre la posible dimensión negacionista de su negación del genocidio estalinista en Ucrania, la historiadora respondió remitiéndose a sus investigaciones y acusando a sus adversarios de querer exculpar a los "autonomistas" ucranianos, antisemitas auxiliares de los Einsatzgruppen. Criticó duramente el uso educativo del documental de M6 Stalin, le tyran rouge, sobre la dictadura de Stalin, que calificó de "vulgata anticomunista" destinada a "asustar a los jóvenes".[45] Teoría de la conspiración sinarquistaEn su obra sobre la colaboración económica de Francia con Alemania durante la Ocupación, Annie Lacroix-Riz defiende la veracidad de la conspiración sinarquista, conocida como la Sinarquía, una teoría de la conspiración considerada un mito por los historiadores contemporáneos. El historiador Robert Paxton señala que la obra de Lacroix-Riz plantea un "problema de fuentes", al encontrarlas incompletas, y crítica a Lacroix-Riz por estar "visiblemente atraída por la teoría de la conspiración". Vuelve al viejo espantajo de la "Sinarquía", contradiciendo con estas historias de sociedades secretas sus propias y muy pertinentes observaciones sobre la lógica del mercado a corto plazo." Con Le Choix de la défaite: les élites françaises dans les années 1930, publicado en 2006 y reeditado en 2009, Annie Lacroix-Riz ha reavivado el interés por esta teoría de la conspiración, y sus conferencias filmadas sobre el tema han tenido cierto éxito en la web. Su libro expone la tesis de un complot sinárquico durante el periodo de entreguerras que habría urdido la derrota militar de Francia en 1940, permitiendo supuestamente a los "sinarcas" acceder al poder. Para el historiador Olivier Dard, autor de La Synarchie, le mythe du complot permanent, el trabajo de Annie Lacroix-Riz sobre el tema se inscribe en un discurso anticapitalista de extrema izquierda que, a través de la sinarquía, instruye el juicio tradicional del "gran capital" y las élites. Concluye que "la intención de Annie Lacroix-Riz es historizar este asunto con fines ideológicos repitiendo una serie de acusaciones ya formuladas en su momento por el Partido Comunista [...] Su uso de las fuentes es el de una investigación exclusivamente incriminatoria cuya conclusión está escrita de antemano por postulados ideológicos claramente establecidos. Además de las críticas formuladas por los historiadores, Conspiracy Watch se apoya en el trabajo de Olivier Dard para reprochar a Lacroix-Riz "la escasa diversidad de sus fuentes", así como la interpretación acrítica de los archivos policiales de la época, que contienen su cuota de inexactitudes y fantasías, en particular el informe "plagado de errores de hecho" que Henry Chavin, director de la Seguridad Nacional de Vichy, presentó al ministro del Interior en el verano de 1941, punto de partida de las denuncias del supuesto "complot sinarquista". Historia de las Relaciones InternacionalesLacroix-Riz también se ha ocupado de la historia de las Relaciones Internacionales. En 1986, escribió un libro sobre la génesis y adopción del Plan Marshall. El historiador Fritz Stern considera este libro como un "análisis tendencioso de las relaciones franco-estadounidenses desde la Liberación hasta el Plan Marshall", "reduciendo a las naciones europeas al equivalente de repúblicas bananeras". Además, Stern señala que Annie Lacroix-Riz no identifica las nuevas fuentes de archivo que dice haber explotado, sino que se limita a referirse a su tesis de Estado como fuente y se refiere "selectivamente" a una "abundante literatura secundaria". En su libro de 1994, Le Vatican, l'Europe et le Reich De la Première Guerre mondiale à la guerre froide, sostiene que el antibolchevismo de la Curia no explica una estrategia vaticana que estaba dictada por consideraciones principalmente territoriales y que se confundía en gran medida con la del Reich: la promoción del germanismo contra el eslavismo en el Este y contra diversos adversarios en el Oeste. Declarando que toda historia religiosa con visión clerical queda excluida de su libro, Annie Lacroix-Riz afirma que Pío XII compartía con sus íntimos alemanes un odio visceral contra los judíos, siempre asimilados al judío-bolchevismo. Añade, en un artículo de Le Monde del 25 de febrero de 2002 titulado "Pío XII, 'el Papa de Hitler'", que con el apoyo de Pío XII, la Iglesia se comprometió activamente en el exterminio en Europa del Este. Desde la década de 2000, analiza las relaciones entre el Vaticano, la Alemania hitleriana y la Italia fascista durante los años 30 y la Segunda Guerra Mundial, y el futuro de los dignatarios nazis y ucranianos en las democracias occidentales. Activismo políticoAnnie Lacroix-Riz es miembro del Polo de Renacimiento Comunista en Francia, asociación de tendencia marxista-leninista (PRCF). En el 2005, fue invitada a participar como ponente en la conferencia Ejes por la Paz, realizada por la organización internacional antiimperialista Red Voltaire. Rudy Reichstadt, en el sitio web Conspiracy Watch, describe la lista de participantes en esta conferencia como "un quién es quién de los más destacados escritores de conspiraciones del momento". Publicaciones• La CGT de la Libération à la scission (1944-1947), París, Éditions Sociales, 1983, 400 p.[46] (ISBN 9782209055302) • Le choix de Marianne: les relations franco-américaines de 1944 à 1948, París, Éditions Sociales, 1985, pues 1986, 222 p.[47] (ISBN 978-2209057900) • Les Protectorats d'Afrique du Nord entre la France et Washington du débarquement à l'indépendance 1942-1956, París, L'Harmattan, 1988, 262 p. • L'économie suédoise entre l'Est et l'Ouest 1944-1949 : neutralité et embargo, de la guerre au Pacte Atlantique, L'Harmattan, 1991, 311 p.[48] • Le Vatican, l'Europe et le Reich de la Première Guerre mondiale à la Guerre Froide (1914-1955), París, Armand Colin, coll. "Références" Histoire, 1996, 540 p.[49] (ISBN 978-2200242923) • Industrialización y sociedades (1880-1970). L'Allemagne, París, Ellipses, 1997, 128 p. (ISBN 9782729867478) • Industriels et banquiers français sous l'Occupation : la collaboration économique avec le Reich et Vichy, París, Armand Colin, coll. " Références " Histoire, 1999, 661 p. (ISBN 9782200251093) • L'Histoire contemporaine sous influence, París, Le Temps des cerises, 2004, 145 p., luego, 2ª edición (1ª, 120 p.), 2010. (ISBN 978-2841094752) • Le choix de la défaite : les élites françaises dans les années 1930, París, Armand Colin, 2009, 2ª edición. (ISBN 978-2-200-35111-3, BNF 41326233). • L'intégration européenne de la France : La tutelle de l'Allemagne et des États-Unis, Paris, Pantin, Le Temps des cerises, 2007, 108 p. (ISBN 978-2841096978). • De Munich à Vichy : l'assassinat de la Troisième République, 1938-1940, París, Armand Colin, 2008, VIII-408 p. (ISBN 978-2-200-35111-3)[50]. • L'Histoire contemporaine toujours sous influence, Pantin, Le Temps des cerises, 2012, 263 p. (ISBN 978-2-84109-954-2) • Aux origines du carcan européen (1900-1960) : la France sous influence allemande et américaine, Pantin, Delga / Le Temps des cerises, 2014, 197 p. (ISBN 978-2-37071-001- 7) • Scissions syndicales, réformisme et impérialismes dominants 1939-1949, Le Temps des cerises, 2015, 250 p. • Les élites françaises entre 1940 et 1944 : de la collaboration avec l'Allemagne à l'alliance américaine, París, Armand Colin, 2016, 496 p. (ISBN 978-2-200-24303-6) • La non-épuration en France de 1943 aux années cinquante, París, Armand Colin, 2019, 672 p. (ISBN 978-2200625146) [presentación en línea [archivo]][51]. Referencias
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