Analía Obarrio, a veces escrito como Ana Lía Obarrio, fue una destacada tenistaargentina, de las mejores en la etapa inicial del tenis femenino de su país.[1] En 1929, cuando la Asociación Argentina de Lawn Tennis instauró la graduación oficial en el país tanto en el tenis masculino como en el femenino, Analía Obarrio se convirtió en la primera número uno oficial de Argentina.[2][3] Se decía de su estilo que parecía bailar dentro de la cancha.[4]