Debido a la política cartaginesa en Hispania de retener a familiares de los jefes indígenas para asegurarse su fidelidad, la bella prometida de Alucio se encontraba en el año 209 a. C. en Qart Hadasht, capital de los dominios púnicos, cuando fue tomada por los romanos bajo el mando del general Escipión el Africano en el transcurso de la segunda guerra púnica.
Con la urbe conquistada, Escipión pidió un rescate por la princesa, y Alucio, profundamente enamorado de ella, respondió llevando hasta el romano un inmenso tesoro. Al contemplar el dolor de los amantes, Escipión se apiadó, liberó a la mujer y entregó el rescate como dote para las nupcias.[3]
Agradecido por el gesto del general romano, Alucio puso a disposición de su ejército una tropa de 1.400 jinetes y le regaló un broquel (escudo labrado en plata, abundante en las minas cartageneras de aquel tiempo).[2] Escipión perdió el regalo vadeando el Ródano, que presuntamente fue encontrado en 1665 por unos pescadores que lo sacaron con sus redes.[3]
↑ abTito Livio, traducido al inglés por Canon Roberts. «Livy's History of Rome: Book 26»(html). En Ernest Rhys, ed. The History of Rome, Vol. 4(en inglés). Londres: J. M. Dent & Sons. Archivado desde el original el 29 de mayo de 2016. Consultado el 16 de abril de 2011.
↑ abcMediano, Juan (1983). Cartageneros: biografías breves. Ayuntamiento de Cartagena. p. 153. ISBN84-500-9460-7.