Activos a largo plazo

Activos a largo plazo son los activos tangibles con un promedio de vida superior a un año, que no está hecho para revender y que es usado en las operaciones de un negocio; estas pueden incluir planta y equipo, pero no inventario o cuentas por cobrar.[1]​ Estos activos son considerados dentro de un balance como activos no corrientes.[2]

Los activos a largo plazo son aquellos que tienen una apariencia física, y pueden ser tocados, tales como monedas, edificios, bienes inmuebles, vehículos, inventario, equipos, y metales preciosos entre otros.[3]

Véase también

Activo (contabilidad)

Activo financiero

Referencias

  1. «División de activos: 3 clasificaciones para entenderlos». www.obsbusiness.school. Consultado el 20 de abril de 2021. 
  2. «▷ Activo Corriente y Activo No corriente: 【CUENTAS Y EJEMPLOS】». CONTABILIDAE. 22 de diciembre de 2020. Consultado el 20 de abril de 2021. 
  3. «Activos no corrientes | Gerencie.com». www.gerencie.com. Consultado el 20 de abril de 2021.