Abenjacán el Bojarí, muerto en su laberinto

Abenjacán el Bojarí, muerto en su laberinto, es uno de los cuentos de El Aleph, libro escrito por Jorge Luis Borges.

Resumen

Este cuento trata de dos amigos, Dunraven y Unwin, que en una tarde de verano uno de ellos relata la historia de Abenjacán el Bojarí, muerto en su laberinto.

Abenjacán era un caudillo o rey de una tribu nilótica, que un día escapa, junto con Zaid, su primo y visir, con todo el tesoro que había logrado. En el desierto, una noche escondidos en una tumba, mientras no podía dormir, mata a Zaid y escapa hacia el mar para que su fantasma no lo persiga.

Llega a Inglaterra y allí construye un laberinto color carmesí, en cuyo centro se esconde. Zaid llega y lo mata borrándole la cara con una piedra, lo mismo hace con el león y el esclavo que custodiaban el laberinto.

Unwin en cambio piensa que esta historia es ilógica y desarrolla una nueva versión:

Esa noche en el desierto Abenjacán durmió y Zaid veló. Zaid pensó matar a su primo, pero no lo logró así que huyó con el tesoro y el esclavo que los acompañaba. En Inglaterra construye un laberinto haciéndose pasar por Abenjacán y se esconde en su centro. Allí llega Abenjacán, atraído por el laberinto, y Zaid lo mata en el centro del mismo, borrándole la cara con una piedra, y haciendo lo mismo con el esclavo y el león.