Librada, Marina, Victoria, Germana, Quiteria, Eufemia, Marciana, Genibera y Basilia. Todas ellas fueron, supuestamente, hijas del entonces gobernador romano de Gallaecia y Lusitania Lucio Castelio Severo y su esposa Calsia. Las nueve hermanas se convertirían posteriormente en mártires cristianas (existe la posibilidad de que hubiesen nacido en el año 120).